Partido Comunista de Chile: los costos del poder

Mientras mucha gente se queja por la "desmedida influencia" del Partido Comunista sobre el gobierno de Bachelet, pocos se dan cuenta del costo enorme que están pagando por haberse incorporado a la Nueva Mayoría. Tal vez me equivoque, pero mi bola de cristal me dice que la participación de los comunistas en el gobierno está resultando desastrosa para ellos mismos, los está alienando de sus bases y me atrevería a aventurar que les puede costar reducirse a su mínima expresión o desaparecer, tal como pasó con los radicales o a los agrario-laboristas 

El Partido Comunista de Chile siempre fue sui generis, raro entre sus hermanos del resto del mundo, tradicionalmente mantuvo una línea ideológica mucho más estalinista que propiamente marxista o leninista. Incluso cuando muere Stalin y llega Krushev al poder denunciándolo como uin sátrapa -dicen que lo escupió cuando estaba agonizando- los comunistas chilenos siguieron fieles al estalinismo, a la estrategia del Frente Popular y todo eso. Recuerden que el propio Neruda le escribió la famosa oda:

Camarada Stalin, yo estaba junto al mar en la Isla Negra,
descansando de luchas y de viajes,
cuando la noticia de tu muerte llegó como un golpe de océano.
Fue primero el silencio, el estupor de las cosas, y luego llegó del mar una ola grande.
De algas, metales y hombres, piedras, espuma y lágrimas estaba hecha esta
ola.
De historia, espacio y tiempo recogió su materia
y se elevó llorando sobre el mundo
hasta que frente a mí vino a golpear la costa
y derribó a mis puertas su mensaje de luto
con un grito gigante
como si de repente se quebrara la tierra.

Y así sigue la letanía interminable que termina con estos versos 
Vino un muchacho y me estrechó la mano.
Más tarde el pescador de erizos, el viejo buzo
y poeta,
Gonzalito, se acercó a acompañarme bajo la bandera.
"Era más sabio que todos los hombres juntos", me dijo
mirando el mar con sus viejos ojos, con los viejos
ojos del pueblo.
Y luego por largo rato no dijimos nada.
Una ola
estremeció las piedras de la orilla.
«Pero Malenkov ahora continuará su obra», prosiguió
levantándose el pobre pescador de chaqueta raída.
Yo lo miré sorprendido pensando: ¿Cómo, cómo lo sabe?
¿De dónde, en esta costa solitaria?
Y comprendí que el mar se lo había enseñado.
Y allí velamos juntos, un poeta,
un pescador y el mar
al Capitán lejano que al entrar en la muerte
dejó a todos los pueblos, como herencia, su vida.

Los comunistas chilenos nunca dejaron de ser estalinistas, es decir, ultra conservadores. Por eso en su época expulsaron a cabezas de pistola como Clotario Blest. y su fortaleza siempre estuvo en el control de los movimientos sindicales y las asociaciones estudiantiles, que les permitían tener un fuerte poder de negociación siendo muy pocos.

Pese a todo lo que hablan acerca de partido de masas, siempre han sido un partido de cuadros, de elite con fuerzas de choque bien seleccionadas y entrenadas en sus escuelas de cuadros, un partido con muchos más simpatizantes que militantes lo que hasta ahora les había permitido movilizar gente en las protestas.

Mi percepción es que a cambo de unas pocas ventajas tácticas -creo que son cinco diputados- que les han permitido a los precious few darse la gran vida, han perdido el capital de superioridad moral que les daba estar fuera del poder, supongo que a estas alturas casi no les quedarán bases y las elecciones que vienen tal vez no las vean fácil. Pese a las desmedidas ventajas con que van corriendo, cupos protegidos y todo eso- igual les podría ir mal en las elecciones. Camila Vallejo es la niña símbolo de la política vendida y corrupta, es de las que recibe más rechazo popular, pese a todas las campañas comunicacionales que han tratado de apuntalarla, su desprestigio es un fenómeno bien parecido al de Bachelet: ambas subieron como un flan y están cayendo como un panqueque.

Pienso que parte importante de las bases del PC de Chile lo irán abandonando para pasarse al anarquismo o a outsiders buena onda, tipo Jackson  y otros pájaros de esa pluma. Creo que va a haber un importante desplazamiento en las bases comunistas porque el estalinismo ya está roto. El espectáculo de la reunión de la Central Única de Trabajadores, bastión tradicional de las movilizaciones organizadas por el PC fue alucinante, ¡los funaron! o sea les dieron de su propia medicina con insultos, golpes y gritos de:

Y va a acabar
y va a acabar
la burocracia sindical

Fueron cocidos en su propia salsa. Parece que ese es el destino que persigue a todos los que en algún momento se asociaron con Bachelet, la presidente se ha convertido en un ancla que hunde a todos los que aparecen amarrados a su figura.

Creo que la gente que se escandaliza por la influencia de los comunistas no ven muy lejos, se están quedando en lo superficial y no se dan cuenta de las diferencias entre avances tácticos y retroceso estratégico. Cada una de las "victorias" que han tenido son victorias a lo Pirro. Incluso Tomás Moulian, que en su tiempo fue candidato presidencial por el Partido Comunista ya les dio la espalda y esa es una señal potente de que se les agotó el capital de superioridad moral que ostentaron por más de un siglo. Creo que están pagando carísimo la decisión de haber entrado a participar al gobierno, y los costos siguen subiendo a medida que pasa el tiempo.