El juego de los boomerangs

Un ariqueño neto menos. Murió el arquitecto Orlando Vasquez, que hizo muchas de las casas más lindas de Arica. Si mal no recuerdo diseñó y construyó las oficinas de Super Audio, la casa de mi amigo Daniel y de muchos otros ricachones de la ciudad. De haber tenido el billete largo encantado le habría pedido que reconstruyera mi casa, pero el que puede puede y el que no, se friega. Era un gran arquitecto-constructor a la manera antigua, no se conformaba con dibujar los planos sino que tenía un excelente grupo de maestros que construían todo lo que él dibujaba. Quedan pocos como él, fue una gran pérdida para la ciudad. La foto donde aparece con su hija tambien arquitecto, es gracias a la cortesía involuntaria de La Estrella de Arica.

Pensaba dejar de escribir sobre el gobierno y sus chascarros, se supone que este Templo del Ocio es sobre temas variados y creo que nunca antes había escrito tan seguido sobre actualidad política chilena. Esto me ha obligado a postergar temas mucho más importantes como la pornografía, la comida, el trago, la filosofía barata y tantos otros. Pero que hacer, como dijo Bachelet en una entrevista "cada día puede ser peor" y la verdad es que no ha parado esta cadena de desaciertos. La querella por injurias que anunció la presidente contra la revista Que Pasa es -a mi modo de ver- la decisión más estúpida de las que ha tomado en toda su carrera política, es imposible dejarla pasar sin un breve comentario.

Los hechos
Como se sabe, ha existido un gran escándalo -sobredimensionado en mi opinión- con los negocios de la empresa CAVAL, del hijo y la nuera de la presidente con otro socio, especialmente con una especulación inmobiliaria que no resultó nada bien y varios otros negocios que se están investigando donde está involucrado el tráfico de influencias. Obviamente la presidente siempre ha asegurado que no tiene nada que ver con el asunto y una de sus frases más famosas y desafortunada fue cuando aseguró "me enteré por la prensa", frase que probablemente ni un solo chileno creyó.

Resulta que se abrío una investigación y la policía empezó a grabar secretamente conversaciones de los involucrados. Uno de ellos fue el operador Juan Díaz quien, furioso porque CAVAL no le había pagado dijo en una conversación que Bachelet había exigido, para si misma, mil millones de pesos a cambio de conseguir el préstamo con el mayor banquero de Chile, que además era su adherente. Agregaba Diaz en la conversación "si yo hablo, la viejita tiene que renunciar" la viejita obviamente es Bachelet en el contexto de lo conversado.

Esta intercepción fue hace un año o más, pero nadie la conocía, finalmente quedó para conocimiento de las partes y la revista Que Pasa publicó una transcripción literal de extractos de la conversación, porque el registro en total llena más de 100 páginas. Apenas publicado en Internet apareció Bachelet en la prensa indignada, hablando de una canallada, diciendo que no descartaba un montaje en su contra y anunciando una querella por injurias. Cosa que fue presentada con gran bombo por uno de los abogados más caros de la plaza.

Las consecuencias
El primer problema fue que no podía querellarse contra Juan Díaz, que fue quien la acusó directamente, porque este lo hizo en el marco de una conversación telefónica privada que fue interceptada por la policía. O sea es imposible configurar un delito de injuria contra él. No se les ocurrió nada mejor entonces que querellarse contra la revista que publicó la transcripcción.

Según mi modo de ver es técnicamente imposible que un tribunal condene a los periodistas por publicar la transcripción de una conversación telefónica intervenida, porque era un hecho de evidente interés público, que además no tenía ningún requisito de secreto y estaba disponible al conocimiento de las partes. Para que exista una injuria lo fundamental es el animus injuriandi o como se escriba, esto no existe por ninguna parte, por más que los abogados pretendan torcer los hechos. La propia revista publicó un largo preámbulo explicando de que se trataba la transcripción y que no eran hechos comprobados. Ojalá hubiesen sido igual de escrupulosos con los cientos de filtraciones que ha generado la fiscalía en el último año y que han alentado los juicios populares contra políticos de oposición.

El punto es que antes existía la sospecha -casi convencimiento popular- que Bachelet usó su influencia para conseguir el préstamo, pero ahora se agrega otra peor: que habría pedido mil millones de pesos como comisión para ella misma. Lo primero ya es casi aceptado por todos, lo segundo puede ser discutible porque el único antecedente que hay es la palabra de Juan Díaz, pero yo lo creo muy probable ¿saben por que? Porque yo, que no soy ningún criminal habría hecho lo mismo, les habría dicho "Ok muchachos les consigo los millones pero esta parte es para papá" (o mami en este caso). No veo por que no habría de hacerlo, cobrar una comisión por la gestión no es ningún delito y CAVAL repartía comisiones por gestión a diestra y siniestra, literalmente.

Pero aquí viene el problema más gordo
Resulta que los tribunales en Chile han aceptado como pruebas incriminatorias lo que se dice en conversaciones telefónicas interceptadas y han condenado a mucha gente, metiéndolos a la cárcel con el razonamiento que si la intercepción es secreta se presume que lo que se dice en privado es verdad. Con ese razonamiento el ex alcalde de Arica Waldo Sankan estuvo preso más de tres años y su amigo Frias me parece que todavía está cumpliendo condena. Con esa "prueba" un gran amigo mío fue condenado y preso durante años por un caso de drogas y para que hablamos de juicios de "derechos humanos" donde los jueces condenan rápida y generosamente a ex militares con simples testimonios como pruebas.

La Revista Jurídica de la Fiscalía afirma que "Producto de la utilización de esta técnica de investigación, el Ministerio Publico ha logrado llevar a juicio a un importante número de casos de alta complejidad, con un alto número de condenas, casos que no habrían podido prosperar sin la utilización de esta técnica". Más adelante en este mismo artículo cita la disposición que permite usar las intercepciones, que quedan a libre determinación del tribunal:

"Art 223 C.P.P. La incorporación en un juicio oral de los resultados obtenidos de la medida de interceptación se realizará de la manera que determinare el tribunal, en la oportunidad procesal respectiva. En todo caso, podrán se citados como testigos los encargados de practicar la diligencia"  

¿Usará la Fiscalía esta técnica -que ha usado tan generosamente contra infinidad de cuidadanos comunes- para llevar a juicio a nuestra presidente? Obvio que no, porque está compuesta por peleles, que son muy rápidos para filtrar y enjuiciar a la gente corriente pero se hacen pipí en los pantalones frente al poder político.

Eso es -creo yo- lo más estúpido de la decisión de querellarse por injurias. Mejor se hubiese quedado piolita, porque no le agregó ni un pelo a su maltrecha credibilidad el hecho de querellarse, al contrario. Con esta querella quedará claro como el agua que de no ser presidente de la república, la Sra. Bachelet estaría siendo enjuiciada ahora mismo, probablemente con escarnio en la prensa como ha ocurrido tantas veces este último año con enemigos del gobierno. Y esa conversación junto con los indicios ostentosamente irrregulares que rodearon al otorgamiento del crédito serían medios de prueba perfectamente aceptables, tal como lo han sido en muchos otros juicios.

La presidente Bachelet parece haberse especializado en el lanzamientio del boomerang: cada cosa que ha hecho se le ha devuelto en contra, pero creo que este debe ser el boomerang más grande y pesado de todos.