Por que no soy anticomunista (y los psicosociales)

Anticomunismo
Esta la voy a hacer cortita. Hay varias razones por las que nunca me ha convencido el anticomunismo, la más obvia es que las ideas, preferencias u opiniones de los demás nos pueden gustar o no, pero no podemos hacer nada para erradicarlas, eso está fuera de nuestro alcance y por más que reclamemos siempre serán reclamos eunucos, del tipo "mi opinión vale más que la tuya" pero que no tendrán ningún efecto práctico aparte de dejarnos furiosos y amargados. Eso no es lo mío.

Por razones similares es que no soy antifascista, antisemitista, antiimperialista ni anti nada por el estilo, Hitler o Marx tenían perfecto derecho a pensar y decir lo que se les antoje y los idiotas que los siguieron también estaban en su derecho de creer lo que estimen conveniente. No existen ideologías intrínsicamente perversas, ni una sola. Eso de pegarse una etiqueta en la frente que dice "soy anti xxx" es característico de personas que enfrentan la política y la vida como los hinchas del futbol, basados en clichés y cantos tontos, cargados de emocionalidad, con lo que se evitan pensar.

Las ideas comunistas, fascistas, sionistas, etc. no tienen nada de malo, son explicaciones que pueden tener razón o no ¿quien puede decirlo? En ciencias sociales y especialmente en política pesan mucho más las preferencias que las verdades, mal que mal nadie puede afirmar que una teoría social o política es "verdadera", nadie en el mundo tiene autoridad para afirmar eso.

Tengo muchos amigos que se declaran anticomunistas, antifascistas, antisionistas, a ellos les doy un consejo: piénsenlo tres veces antes de declararse anti cualquier idea. Creo que es un gran error, no es una actitud inteligente, eso a mi me tomó años darme cuenta y les dejo el consejo gratis.

Por el contrario, mejor estudien el comunismo, el fascismo y todos los demás ismos, traten de entender por qué aparecieron y que cosas lo explican. Eso no quiere decir que se vayan a convertir en comunistas o lo que sea, sino que les permitirá afirmar sus propias preferencias con argumentos, mucho más sólidos que las consignas básicas y la retórica hueca que se usa normalmente en las discusiones políticas.

Porque lo peor de la política actual es esa actitud de barra brava que se ha propagado por todas partes y que convierte cualquier discusión -que debería ser una confrontación de ideas- en peleas de bar de mala muerte. Muchos de los vicios que le atribuímos a los políticos son alimentados por el hecho que la gente común disfruta con estas peleas de barra brava basadas en consignas básicas, emocionales, del tipo "eterno campeón", "más que una pasión un sentimiento" y estupideces por el estilo. Ese es el origen que explica tanta gente fanática metida en política y, lo peor de todo, que les vaya bien en las elecciones.

Operaciones psicosociales
Bueno, lo anterior era en el plano de las ideas y teorías, pero también está lo más concreto que son las acciones políticas de cada día, lo que hace la gente para alcanzar el poder político. Las mieles del poder, se han hecho tan rentables que todo el mundo sueña tener un puesto en el gobierno, una silla en el parlamento, municipalidad o lo que sea. Tenemos en Chile los políticos con más beneficios y privilegios de todo el mundo ¿y como llegamos a eso? Mientras los giles discutíamos como hinchas de barra brava a ver quien la tenía más grande los más vivos se arreglaron, ellos y sus descendientes. Nos hicieron cholitos.

Porque toda esta pelea de barras bravas es muy útil para que sinverguenzas y ambiciosos que se dicen comunistas, centristas o conservadores ganen elecciones a costillas de los giles que votan, porque fulanito dijo la frase más ingeniosa, demagógica o punzante. Existe una fábrica de clichés, de ideas-fuerza mentirosas, destinadas a alimentar las barras bravas y en política esto se expresa a través de las operaciones psicosociales.Hay tres polémicas muy similares que armó la gente de la actual Nueva Mayoría y son típicos psicosociales.

El primero fue en el año 2012 cuando el gobierno de Piñera hizo la encuesta CASEN y un economista de izquierda sugirió que el cambio de metodología había sido con la intención de mejorar los números del gobierno. Un gran escándalo, seguido por polémica que terminó con que la CEPAL se retiró de colaborar con la encuesta por razones nunca bien aclaradas. El diario New York Times apareció haciendo graves acusaciones al gobierno de Piñera y después de un tiempo todo se desinfló, el cambio de metodología no había sido otra cosa que un ajuste técnico perfectamente justificado, pero el asunto sirvió para alimentar la pelea de barras bravas durante unos meses.

También el año 2012 se realizó el censo de población y -siguiendo idéntico patrón- apareció un "experto" cuestionando que estaba mal hecho y había que repetirlo. El New York Times apareció nuevamente titulando “En Chile una comisión recomienda desechar Censo 2012", mientras en el cuerpo de la noticia decía  “la reputación de Chile de proporcionar algunas de las estadísticas oficiales más sólidas en América Latina se ha visto afectada por las preguntas que rodean la recopilación de los datos del censo.”. La cosa es que Bachelet repitió la encuesta con un "censo abrfeviado" a un costo multibillonario... que dió prácticamente las mismas cifras, las diferencias se pueden explicar fácilmente por asuntos metodológicos muy menores, aplicados expresamente para maquillar el bochorno.

Este año apareció -sorprendentemente- el economista jefe del Banco Mundial pidiendo "disculpas" a Chile en una entrevista del Wall Street Journal, porque supuestamente la metodología aplicada en el Ranking de Compeptitividad había beneficiado al gobierno de Piñera y perjudicado al de Bachelet, "potencialmente" por razones políticas. Esta intencionalidad fue inmediatamente desmentido por una nota del propio Banco Mundial, pero el alimento para la barra brava ya estaba lanzado, los políticos pro gobierno y su prensa se lanzaron con todo a denunciar el "fraude" del Banco Mundial. Obviamente estos rankings cambian su metodología constantemente y no hay razones para atribuír un cambio -que afecta a todos los países del mundo iba a ser específicamente con la intención de perjudicar el pésimo gobierno de Bachelet.

Si se fijan los tres casos son idénticos. Los tres tienen cambios de metodología donde un "experto" con intereses políticos aparece denunciando un fraude inexistente -porque las metodologías de las mediciones se adaptan constantemente a realidades cambiantes- y sobre todo los tres casos son amplificados por el "prestigio" de los medios de prensa que se dedican a hacer fake news con propósitos políticos.

Las barras bravas se lanzan a la pelea y mientras estamos todos ocupados en eso, nos hacen cholitos haciendo lo que quieren, apernando a los amigos y pasando leyes de último minuto. Esto no tiene nada que ver con ideologías, es simplemente el uso de la demagogia para distraernos y engañarnos, por eso estamos como la mona, esa es la explicación.

Una muerte en la familia
Ayer me avisó Consuelo sobre la muerte de su padre, Roberto Bonilla Bradanovic en la ciudad de Santiago, quien tuvo una larga trayectoria como médico cirujano en el Ejército de Chile, donde llegó al grado de general, siendo por varios años director del Hospital Militar. Me dice que fue una muerte tranquila y repentina. Tenía más de 90 años y era el último sobreviviente de los hermanos Bonilla Bradanovic, una familia muy destacada, queridísimos en Iquique, su ciudad natal: Delia, Oscar, Tomás, Roberto y Guillermo. Mis condolencias para esa extraordinarioa rama de la familia.