Estoy releyendo El Anticristo, como se filosofa a martillazos de Fiedrich Nietzsche. Que libro más lùcido, pensar que fue escrito en el Siglo Diecinueve, pero ha sido increíblemente prófético. Hoy, en el Siglo Veintiuno, está más vigente que nunca. Un cura amigo, me conversó hace muchos años que en el seminario les hacían estudiar a Nietzsche con detalle, de manera similar a como un economista liberal hoy, si pretende estar bien preparado, debe estudiar a fondo el marxismo "para comprender bien sus falacias". No era una buena comparación, por la barbaridada de poner a Nietzsche y Marx lado a lado, pero algo sirve,
La crítica rabiosa de Nietzshe se dirige principalmente contra la modernidad "Estábamos aquejados de esta modernidad, de una paz pútrida, de un compromiso perezoso, de toda la virtuosidad impura del sí y del no modernos. Semejante tolerancia y amplitud de corazón, que lo perdona todo porque lo comprende todo, es para nosotros viento de sirocco. Vale más vivir entre los hielos que entre las virtudes modernas y otros vientos meridionales... ".
(...) La humanidad no representa una evolución hacia algo mejor y más fuerte o más alto como hoy se cree. El progreso no es más que una idea moderna; esto es, una idea falsa. El europeo de hoy está muy por debajo del europeo del Renacimiento: un desarrollo sucesivo no es absolutamente, con cualquier necesidad, elevación, ni incremento, ni refuerzo.
Esto es lo que hoy conocemos como el "buenismo", esa obsesión por aparecer como más bueno, compasivo y de corazón más generoso que los demás "Quizás, por el contrario, fue querido, cultivado, obtenido, el tipo opuesto: el animal doméstico, el animal de rebaño, aquel animal enfermo que se llama hombre: el cristiano..."
Desde luego, en esto Nietsche culpa a los teologos y sacerdotes "La realidad puesta en el lugar de esta miserable mentira, significa: una raza parasitaria de hombres que prospera únicamente a expensas de todas las formas sanas de la vida, la raza del sacerdote, que abusa del nombre de Dios, que llama reino de Dios a un estado social en el que el sacerdote fija el valor de las cosas, que llama voluntad de Dios a los medios con los cuales semejante estado es conseguido o conservado; que, con frío egoísmo, mide los pueblos, los tiempos. los individuos, por el hecho de que ayuden o contraríen el predominio de los sacerdotes". Aunque se refería a los sacerdotes hebreos, esta es, mi modo de ver, una descripción perfecta de sus continuadores, la actual Compañía de Jesús, entre otros.
Hace dos siglos Nietzsche describió lo que está pasando ahora, los actuales copitos de nieve animalistas, feministas, ecologistas y guerreros de la justicia socal: "El odio instintivo contra la realidad es consecuencia de una extrema incapacidad de sufrimiento y de irritación, que no quiere ya ser en general tocada, porque de todo contacto recibe una impresión demasiado profunda.
La exclusión instintiva de todo lo que nos repugna, de toda enemistad, de todo límite y distancia en el sentimiento, es consecuencia de una extrema incapacidad de sufrimiento y de irritación, que siente ya como un dolor intolerable (o sea como nocivo, como desaconsejado por el instinto de conservación) toda resistencia, toda necesidad de resistir, y solo conoce la beatitud (el placer) en no oponerse ya a nada"
Para mi resulta impresionante la lucidez de este librito, que proyectó una interpretación histórica (equivocada a mi modo de ver) pero el diagnóstico del camino que estaba tomando el pensamiento moderno, fue extraordinariamente adelantado a su tiempo, hace más de un siglo Nietzsche identificó una corriente de pensamiento que se estaba desarrollando en los filósofos alemanes que estaban de moda entonces, como Kant y Schopenauer, no solo eso, supo explicar sus raíces y proyectarla hacia el futuro, con razón escribió:
Este libro está hecho para muy pocos lectores. Puede que no viva aún ninguno de ellos. Esos podrían ser los que comprendan mi Zaratustra ¿acaso tengo yo derecho a confundirme con aquellos a quienes hoy se presta atención? Lo que a mi me pertenece es el pasado mañana. Algunos hombres nacen póstumos.
La modestia no era una de las virtudes de este hombre. He tratado de leer sus otros libros pero no hay caso, el propio Zaratustra, lo encontré una porquería y para que hablar de lo ensayos sobre los griegos y otros marmotretos, para mi gusto al menos, es un one-hit-wonder y El Anticristo, un librito como de setenta páginas es lo único que vale la pena leer, pero con ese basta y sobra, es como El Gran Gatsby de la filosofía.Fiedrich Nietzsche, visionario y loco como una cabra,
El Anticristo, que pedazo de libro. Creo que hacer leer y estudiar El Anticristo a los seminaristas es una medida muy astuta, claro que lo hacen después de un largo proceso de lavado de cerebro. Si alguien después de leer ese libro y entenderlo, todavía cree en los valores fundamentales de la crsitiandad, es que el proceso de deformación de la mente fue un completo éxito, debe ser una especie de examen de fe.
NULLA DIES SINE LINEA. Filosofía barata, historias, historietas, moralejas, chamullos, relatos absurdos, la vida de un vago, cosas de Arica, literatura, música, pornografía, política, física, cocina regional, minas, copete y cosas por el estilo. The awesome, absurd and often bored adventures of our Man of Mystery in Arica, from the trenches, in the Northern Front. Sacar a mil, sacar a mil. Streams of brilliance often spring from boredom. "Be yourself, but bigger"
Páginas
▼
Gran libro. Así habló Zaratustra es fundamental, au que algunas partes un poco enredadas, lo escribió ya enfermo. Lee "Voluntad de Poderío", pienso que ahí está el resumen de su obra, es mas largo pero compuesto por aforismos, por lo tanto muy directo, al contrario de Zaratustra.
ResponderBorrarEs fundamental leer a mi "amigo" Federico.
Yo no pude terminar el "Así hablaba Zaratustra"; tomo nota del Anticristo y del Voluntad de Poderío.
ResponderBorrarSpengler, tras la primer guerra mundial, uso unos tonos parecidos en "La Decadencia de Occidente"
Inevitablemente la historia coloca el vitalismo, la idea del superhombre y la moral de los señores - frente a la moral de los esclavos, que sería la que practican los sacerdotes - en línea con el advenimiento posterior del nazismo.
Pero obviando eso, se entiende el punto. Como jesuita exageradamente buenista tienes a Francisco, el Papa, además bastante peronista en sus orígenes.
Todos habrán visto alguna vez "La Misión" aquella recreación de las misiones jesuíticas arrasadas por un acuerdo entre los españoles y portugueses en el siglo XVIII. Allí se destruye por la maldad de los hombres un pequeño paraíso en la Tierra formado entre buenos jesuítas y laboriosos guaraníes, una suerte de comunismo teológico, sociedad de propiedad común y esfuerzo cooperativo, bla bla.
La historia completa es que España recuperó la administración luego y envió funcionarios civiles y sacerdotes de otras órdenes para suplir la expulsión jesuita. Las misiones igualmente languidecieron. No se sabían administrar sin el paternalismo jesuíta y sus privilegios del momento. No surgieron liderazgos propios. Los jesuítas llamaban al indio "el eterno niño" y lo tutelaban toda su vida. El naturalista Azara, que recorrió la zona en esa época, observó el régimen que imponían los portugueses: prohibieron los casamientos de misma sangre, al hombre que colonizara esa zona le exigían matrimonio mixto con guaraní. Una mestización forzada para promover la integración, pero en lo demás, los guaraníes tenían mismos derechos y obligaciones que los blancos.
Azara observó que los individuos así tratados se incorporaban a la sociedad brasilera facilmente, mientras los afectados del jesuitismo y luego abandonados derivaban hacia un estado de desorden y apatía, hacia la pobreza extrema.
El anticristianismo de Nietzsche solo resulta coherente para quienes consideran que el culto romano es cristiano. Escarbar un poco en la simbología, historia y relaciones semánticas del catolicismo y compararlas con el texto bíblico no hace daño, al contrario.
ResponderBorrarNietzsche fue uno de los primeros modernistas que al repudiar a Dios, comenzó a aserruchar la rama sobre la cual estaba sentado. No en vano sus últimos días los pasó en un manicomio, al parecer arrepentido, ya que citaba precisamente eso que decía odiar; los textos bíblicos.
Por algo Nietzsche fue el combustible ideológico que inspiró a Hitler y a Stalin.
Saludos cordiales,
D.
Hay un ensayo de Ayn Rand llamado Los comprachicos. Son unos textos muy muy largos, pero muy ilustrativos en cómo desde la educación les deforman el cerebro a la gente.
ResponderBorrar