Elecciones europeas: un fuerte aviso de lo que viene

Las elecciones europeas son parte de una serie de señales que avisan algunos cambios fundamentales de la sociedad en en futuro muy cercano, en realidad son cosas que están ocurriendo ahora mismo pero, igual que cuando se inventó la imprenta o apareció Internet, nadie se dio mucha cuenta mientras pasaba la cosa, creo que está llegando un cambio enorme en la política, casi como cuando pasamos del feudalismo y la nobleza al dominio de la burguesía.

La conclusión
Partiré por la conclusión y esto es solo mi opinión personal de como yo veo la cosa: pienso que estamos asistiendo al fin del globalismo que se instaló desde el fin de la Segunda Guerra Mundial, con la Sociedad de las Naciones y luego con las Naciones Unidas. Curiosamente la globalización es la que ha herido de muerte al globalismo

El globalismo es un cuerpo de ideas social demócratas impuestas por el pensamiento de Franklin Delano Roosvelt y su piedra fundacional era el miedo a que volviera el fascismo de los nazis. Eso llevó al embrión de la idea de un Gobierno Mundial, al que estarían sujetos los estados nacionales en las cosas que se consideraban más importantes, específicamente en los "crímenes de lesa humanidad" que dieron origen a la Carta de los Derechos Humanos.

El llamado "Sistema Internacional" armado en base a tratados y pactos que hicieron firmar a los países mediante una combinación de sobornos y la amenazas, nació fallado, hoy estamos viendo el derrumbe del globalismo en gran parte gracias a la globalización, pero ya llegaremos a eso.

Las pifias del globalismo
Las fallas fundamentales de este pretendido Sistema de Gobierno Mundial fueron muchas, pero entre las principales podemos nombrar a que se aceptó dentro del sistema al bloque de los países comunistas, que cometían atrocidades peores que los nazis pero todos miraron para el lado, la incorporación de Unión Sovietica y sus satélites fue una falla fundamental que desvirtuó al sistema internacional desde su origen. Fue como poner a los criminales asociados de igual a igual con gente honrada a cargo de manejar los tribunales.

Otra falla fue que, de manera natural, se fue creando una burocracia endógena y recesiva en base a los peores políticos de cada país del mundo. Los peores y más inescrupulosos se apoderaron del sistema, lo que explica por ejemplo que hoy Bachelet sea una "Alta Comisionada" de los derechos humanos, Arenas "investigador" del PNUD, etc.

Finalmente podemos mencionar que a este extraño "Gobierno Mundial" solo quedaron sometidos los países pequeños y sin fuerza, ningún país importante aceptó delegar su soberanía a tribunales internacionales, ningún país importante entregó una pizca de su soberanía, eso quedó para el perraje como nosotros, y los jueces de esas cortes, elegidos por la burocracia corrupta terminaros siendo lo peor del perraje de cada país.

Durante muchos años los organisms internacionales han ido perdiendo prestigio, todos. Antes la UNICEF, UNESCO, CEPAL, OIT y tantos otros eran respetados como dioses y jueces supremos, cuando yo era chico -en los sesentas- todavía eran considerados autoridades indiscutidas y lo que ellos dictaban era como encíclicas papales: infalibles. Pero con los años se fue viendo que eran simples camarillas manejadas por políticos mediocres, donde las decisiones técnicas apenas se tomaban en cuenta. No solo perdieron el prestigio sino que adquirieron un desprestigio enorme. Hoy nadie les cree y existe un gran resentimiento en su contra.

La globalización mató al globalismo
La globalización aceleró este proceso de desprestigio simultáneamente por todo el mundo. Antes los organismos internacionales conservaban cierta aura de respetabilidad por los grandes edificios, los altísimos sueldos y las apariencias de pompa y circunstancia que -como esos bancos con columnas de mármol- daban la apariencia de solidez y seriedad. Pero hoy, cuando todo se sabe rápidamente esa escenografía no funciona y la mala reputación se ha ido extendiendo como una mancha de aceite sobre estas organizaciones, antes respetables.

La idea original del Gobierno Mundial estaba basado en un esquema socialdemócrata que tuvo que convivir con el comunismo durante varias décadas hasta su derrumbe. Es curioso que gente como Francis Fukiyama todavía sean tomados en cuenta después de haber análisis tan miopes, como cuando pronosticó que el derrumbe del socialismo traería la hegemonia socialdemócrata y el globalismo total, tal como soñó FDR en su momento, manejado con guante de seda de un benévolo Tío Sam a través de la ONU. No pudo ser más miope ni estar más equivocado, igual lo invitaron y le pagaron por venir a decir sus tonteras en Chile, a la otra mejor me invitan a mi que estoy cesante.

Lo que pasó en Europa
Pero vamos de una vez al plato de fondo, que son las elecciones europeas. Lo que pasó es un resurgimiento fuerte y al parecer irreversible -al menos hasta donde se puede prever-  de los nacionalismos. Hasta hace pocos días escuchaba comentaristas asegurar que si en Inglaterra se volvía a hacer un plebiscito sobre el Brexit con toda seguridad los ingleses se arrepentirían, me gustaría escuchar a esos tontos ahora que el partido de Nigel Farage sacó el 30.5% de los votos con 29 eurodiputados. Inglaterra ni siquiera debió participar en esas elecciones, pero lo hizo y ahí están los resultados.

Para que hablar de Francia, donde el partido de la hija de Jean Marie Le Pen, Reagrupamiento Nacional, 23.31% con 22 eurodiputados. En Italia Matteo Salvini La Liga, alcanza el 34.3% consolidándose como líder absoluto en el país, la mejor noticia es que desbancó a su competidor nacionalista 5E fundado por el payaso Beppe Grillo, por un momento los italianos recobraron la cordura, ojala les dure aunque con Italia nunca se sabe. En Polonia los nacionalistas de Ley y Justicia arrasaron con un 46% de los votos. En Bélgica los nacionalistas de N-VA y de VI Belang juntan una considerable mayoría con cerca del 25%.

Excepciones
Obviamente hubo unas pocas excepciones: en Alemania ganó el partido de Merkel, tibiamente conservador, en Grecia y Finlandia también ganó la centroderecha tradicional. En España y Portugal (como no) ganaron los socialistas, pero no es para preocuparse, ba asta darles un par de años gobernando y quedarán enterrados en el desprestigio, es lo más seguro.

Sin duda hay una tendencia clara y rabiosa hacia el nacionalismo en todos los países importantes de Europa y no es el "proto-fascismo" o "populismo" como tratan de caricaturizar los desesperados social demócratas (que están haciendo agua en casi todos lados) sino que una simple vuelta a los valores tradicionales de orden, patriotismo, sentido común, imperio de la ley, fin al internacionalismo y toda la demagogia progresiva que ya conocemos.

Si, ya se a que les suena eso, son obviamente las mismas ideas de los que apoyamos a José Antonio Kast acá en Chile. Para allá es adonde van todas las micros.