Google y Huawei

Una compra equivocada
En el año 2014, cuando recién s empezaron a popularizar las tablets de bajo precio, yo me entusiasmé enseguida  y compré a ojos cerrados una tablet china de 50 dólares, pensé que los chinitos por fin habían descubierto el Santo Grial de la computación ¡Android a 50 dólares! El resultado de esa experiencia fue horrible y para lo único que me sirvió el asunto fue para escribir una entrada en este mismo blog que se llamaba Porqué las Tablet Chinas son Tan Baratas, pronosticando que todo el mundo iba a comprar esos milagrosos aparatitos en el futuro. Bueno, parece que no siempre le apunto.

Después de pasar muchas rabias restaurando y tratando de instalar todo desde cero, me empecé a dar cuenta que los problemas no estaban en las aplicaciones, sino en el firmware, es decir lo que venía grabado en la ROM por el fabricante y no se podía modificar de ninguna manera. Incluso teniendo acceso root, que supuestamente me daba conrtol total sobre que se instalaba y que no, nunca pude eliminar una aplicación reconocida como troyano, para robar contraseñas y que colgaba a la tablet a cada rato.

En ese momento fue cuando empecé a pensar mal.Primero que nada la tablet no tenía ninguna marca y al parecer era un aparato específicamente diseñado para robar los pares de nombre de usuario y contraseña, una especie de keylogger incorporado e imposible de eliminar.Bueno, sabiendo eso no me quedó otra cosa que desarmarla par ver como estaba hecha, romper la batería con el mismo propósito y las partes que quedaron andan por algún lado botadas. Se trataba de un aparato no solo inútil sino potencialmente dañino. Hoy nadie en su sano juicio compra una de esas tablets.

Leo en Wikipedia la historia de Google China
Solo en China o en Rusia, que son las zonas francas de la piratería y el software malicioso en el mundo, es posible que fabriquen algo así, en cualquier otro país civilizado el fabricante habría sido denunciado y preso, no en China, porque ni siquiera se sabe quien diablos era el fabricante. Y ese es el caso de casi todos los productos que compramos por e_Bay o Ali Express por ejemplo, son fabricados por empresas que no conoce nadie e incluso podrían ser marcas falsas, como las tablet chinas Hyundai, que no tienen nada que ver con la gigantesca empresa coreana, pero igual le robaron su nombre.

Google desarrolló su interfaz en idioma chino el año 2005, lanzando google.cn, pero fue inmediatamente censurada por el gobierno chino. entonces se estableció Google China, liderada por un antiguo ejecutivo de Microsoft, que funcionaba bajo un esquema de "autocensura". El año 2009 el gobierno chino censuró Youtube, de propiedad de Google y el buscador Google.cn que había llegado a ser la tercera más visitada del país con un 36.2% bajó violentamente a un 1.7% el año 2013.

En pocas palabras, Google fue sacada del mercado local por el Gobierno Chino. La "censura" que aceptó Google para funcionar en China incluía el filtrado que bloqueaba las búsquedas que el gobierno consideraba inconvenientes. El año 2010, en respuesta a un ciber ataque con origen en china, Google anunció que dejaría de filtrar las búsquedas y dejaría de operar en el país si persistían las presiones.

Y así lo hicieron, redirigiendo todas las búsquedas de google.cn a Google Hong Kong, donde existen leyes independientes que no pueden obligar a la censura vigente en China. A partir de 2014 el Gobierno chino prohibió la operación de Gmail y el navegador Chrome o cualquiera de sus derivados en el país. De est manera, el Gobierno chino dejó a Google fuera de un mercado de unos 380 millones de personas. En el 2010, Google China tuvo una cuota de mercado de 29% en 2012, del 5%, y en 2013 del 1,7%.

La revancha del Tío Sam
Este año, ante la arremetida de Huawei por implementar la infraestructura 5G, que en el fondo significa más células con transmisores y antenas, más cerca uno de otro para poder obtener más velocidad, pero se trata sobre todo de imponer un estándar único que determinará que equipos podrán funcionar en 5G y cuales no, es decir, el que establece el estándar se queda con la venta de todos los equipos -teléfonos o lo que sea- en el país.

El poder de un estándar no es difícil de entender: imagínense que mañana deciden la compra de un computador y tenemos dos opciones: en el equipo A funciona todo el software que conocemos y en el equipo B no funciona Google, Office, Gmail ni nada de Microsoft ¿cual elegirían? Bueno, quienes implanten el próximo estándar 5G tendrán en su mano decidir que aplicaciones funcionan y cuales no en los equipos que la gente se verá obligada a comprar.

Y así es como Trump le acaba de ofrecer la dulce venganza a Google, haciéndole a una empresa china "de bandera" lo mismo que le hizo el Gobierno Chino a Google: anunció que, debido a que las empresas chinas -particularmente Huawei- incorporan firmware espía, decretaría un embargo que prohíbe que software Americano se ejecute en equipos de esa empresa.

De hacerse efectivo ese embargo, Google o cualquiera de sus productos, al detectar que una petición viene de un dispositivo Huawei, simplemente no la ejecuta. Microsoft, al detectar que Office o  cualquier otro software de la empresa está instalado en un dispositivo Huawei, no se ejecuta. Es algo que tecnológicamente no cuesta nada de implementar.

Las razones del gobierno de Estados Unidos son principalmente de seguridad nacional por sospechas de espionaje informático, pero también hay una razón de simple reciprocidad que justifica este embargo: así como el gobierno Chino sacó a Google del mercado de China, el gobierno de los Estados Unidos puede, por simple reciprocidad, sacar a Huawei de los mercados del mundo, prohibiéndo el uso de software Americano en sus equipos.

En mi opinión, a Huawei le pasó los mismo que al comerciante ambulante que vendía en la calle sin pagar impuestos ni estar sometido a ninguna regulación, y entonces empezó a ganar muchísima plata por la gran ventaja que tenía sobre los comerciantes establecidos, pero al crecer el panorama cambia y no puede seguir trabajando como un bandido. pasar a la formalidad es un proceso muy difícil y es lo que enfrenta hoy Huawei y enfrentarán luego muchas otra empresas chinas que han crecido.

Y lo mismo el gobierno de China, que ha estado durante décadas en una política oportunista que aprovecha todas las ventajas del libre mercado pero se niega a pagar ninguno de los costos. No hay que olvidarse que China mantuvo una guerra de monedas que le permitió parasitar del sistema monetario internacional durante décadas, bueno, eso tenía que parar en algún momento y ese momento está llegando, China no podrá seguir siendo el cafiche del mundo, deberá empezar a pagar los costos y de paso en todo el mundo vamos a pagar el costo de este aterrizaje forzoso de vuelta a la realidad.