El primer debate Trump vs Biden

 

Ese twit refleja exactamente mi opinión  sobre el debate presidencial entre Trump y Biden de anoche. Donald Trump llega a ser infantil en su antipática petulancia, es ególatra y, como persona, uno de los políticos más desagradables que he conocido. Dicho esto, ha demostrado ser un gran presidente, de convicciones firmes y que hace lo que dice. Políticamente creo que es un líder más grande que lo fue el entrañable Ronald Reagan.

Pese a toda la faramalla de acusaciones e insultos que balbuceó Biden, Trump -que se los contestó multiplicados por dos y añadió otros cuantos- ha mostrado éxitos extraordinarios como presidente, no solo soportando el acoso legal y comunicacional de la jauría rabiosa: los Clinton, Obama, Sanders y todo el resto -varios de ellos debiesen estar encerrados- y el ataque de la mayor parte de los medios de prensa que representan intereses muy poderosos y oscuros.

No conozco en la política tradicional americana otro con la capacidad de proteger al mundo de la camarilla de delincuentes, elegantes billonarios y gente de la alta política, así como del corrupto y siniestro gobierno de China. Trump es una figura histórica de esas que aparecen en momentos de necesidad, tal vez sea exagerado compararlo a Churchill, pero no hay que olvidarse que en su época Sir Winston fue similarmente aborrecido. 

Igual que contra Hitler en los años treinta, se necesita alguien con la voluntad de un toro y cuero de rinoceronte para enfrentar el peligro actual, y los que tienen esas características rara vez son los tipos más simpáticos del mundo. Creo que sus mismos defectos le ayudan porque los combina bien con su conocida capacidad negociadora, que a estas alturas es imposible negar.

Entre sus mayores logros como presidente han estado la forma en que frenó a Kim Jong Un, intimidando y retrocediendo consiguió controlarlo y sobre todo separar la alianza histórica que tuvo Corea del Norte con China durante muchos años. Que haya conseguido organizar dos cumbres con el coreano sin que China haya intervenido, fue un triunfo diplomático asombroso. Antes de Trump nadie soñaba negociaciones con Corea del Norte saltándose a China.

Con esa misma combinación de intimidación y retirada, está manejando a China, y por primera vez en décadas con éxito. Ningún presidente, ni político americano, jamás ha insultado a un gobierno chino tanto como él, sabe perfectamente que las palabras y amenazas no sacan pedazos, esa es su forma de negociar y funciona, porque China, tal como Corea del Norte son gobiernos depredadores, que no respetan a los débiles ni menos a los cobardes, para ganar el respeto hay que enfrentarlos sin miedo ni vacilaciones. 

Rusia, que es la única potencia militar en el mundo con capacidad para amenazar a Estados Unidos, también está bastante controlada. A pesar que se han dicho de todo, Putin le muestra a Trump un respeto mayor que a cualquier otro presidente americano con que haya tratado, probablemente porque comparte su estilo de negociación, aunque Putin tiene mucho más estilo y  menos estridencias, por ejemplo con sus detractores usa el veneno.

Otra gran cosa que Trump ha logrado es unir a muchos países vecinos contra China, aprovechando las ambiciones expansionistas de este país en el mar cercano, Trump ha articulado una alianza entre Vietnam, Taiwan, la oposición de Hongkong y Cambodia -"la Alianza del Té con Leche"- para frenarlas. Probablemente nunca se llegue a enfrentamientos, pero el Gobierno Chino está muy consciente que no tiene capacidad para tirar el mantel en esa zona, al menos mientras Trump esté en el gobierno.  

El debate fue un espectáculo lamentable, eso es cierto. No puedo dejar de pensar que tremendo presidente hubiese sido Donald Trump si hubiese tenido algunas pocas de las habilidades sociales de Ronald Reagan, pero que diablos, hay algunas virtudes que no se pueden tener sin sus defectos porque toda moneda tiene dos caras y en este caso las virtudes son mucho más importantes que los defectos.

Sobre John Biden, creo es un pobre hombre, el típico político burócrata que ha hecho su vida en Washington sin nada que valga la pena en toda su carrera. Con su hablar vacilante, expresión asustada y su dificultad para pensar y expresar sus ideas da pena. Me imagino que sería una tragedia para Estados Unidos y para todo el mundo si lo eligen de presidente, ojala que eso no ocurra y no haya una marioneta en Washington, digitada por los malos, en el próximo período.

¡Que fácil estaba Biden para ganarle debatiendo! Creo que un estudiante de secundaria lo hubiese humillado, no se necesitaba mucho para dejar en evidencia el tipo mediocre, inseguro y medio tonto que es. Lamentablemente Trump no aprovechó la oportunidad, ni supo controlarse. Con las interrupciones innecesarias y tonteras que dijo, dejó pasar la oportunidad de oro. En fin, ojala para los debates que vienen se pueda controlar y lo haga mejor. Creo que es un tipo indispensable en estos tiempos, no vaya a quedar fuera por atolondrado nomas.