Nosotros pasamos, divagando

Como se dijo se hizo, ayer finalmente prendí la parrilla, aprovechando que el Tomás Jr. cumplía 30 años ¡Diablos, como pasa el tiempo! Conversaba con una amiga que est´en las mismas, recuerdo cuando sus hijas eran unas niñitas y ahora son veinteañeras, veo en el Facebook de otra amiga a sus gemelas, también de veintitantos y me acordé cuando mi amiga estaba embarazada.

Time goes, you say? Ah no! Alas, Time stays, we go;
¿Dices que el tiempo pasa? Ah, no, el tiempo se queda donde mismo, nosotros pasamos

Me acordé de esa extraordinaria línea que leí en alguna parte hace tantos años. Entonces me vino la curiosidad de saber quien lo había escrito así es que fui donde el literato Sr. Google y la encontró en seguida, la frase es del poeta inglés Henry Austin Dobson. El poema completo se puede leer aquí.

Yo tengo pésima memoria y mi concentración es peor que la de un mosquito, pero en cuanto leo algo no se me olvida nunca más. Tanto así que incluso recuerdo que leí esto en la revista Scientific American, el año 1978 cuando estaba en primer año de la universidad y pasaba metido en la hemeroteca. Lo leí en un artículo sobre "la flecha del tiempo" como la entendía Arthur Eddington, creo que si viera el artículo de nuevo lo reconocería enseguida. Gracias a eso tengo una ortografía razonablemente buena y la redacción me sale muy fácil.

Ayer por ejemplo vi una entrevista a Yuval Noah Harari, el historiador judío que escribió el libro Sapiens: de animales a dioses ycomprobé que estaba recitando casi textual a su libro, lo que resulta un poco molesto para un lector memorión como yo, pero igual el libro es muy bueno y la entrevista también.

Además de recitar el libro con la famosa idea esa de la imaginación y la capacidad para armar historias y mitos como la característica que nos diferencia de los animales, y que nos había puesto por encima de todos los demás, dijo también otras cosas divertidas e interesantes. Por ejemplo decía que nació en Israel que es la mayor fábrica de mitos del mundo, partiendo por el mito de la Tierra Prometida, la raza escogida por Dios y la monumental colección de mitos de la Biblia.

También habló sobre eso que el activo más valorado en estos tiempos es la atención, hay una guerra despiadada para obtener la atención de los demás y eso es muy cierto, de hecho incluso a microescala, en este minúsculo Templo del Ocio yo peleo todos los días por conseguir la atención de los más inteligentes, que es otra forma de decir los que piensan parecido a mi. Se que un nicho pequeñísimo pero a eso me dedico. 

Es un gran regalo que todos los días alrededor de 200 amigos pierdan su tiempo cada día leyendo las tonteras que escribo. Durante muchos años mi audiencia eran entre 500-600 diarios pero hace un par de años esta bajó de un día para otro, probablemente por el refinamiento de los contadores de visitas y sus analíticas, combinado con que Google por alguna razón me bajó el puntaje en su motor de búsqueda. Para mi Statcounter es lo que uso hace años y nunca he visto uno que entregue analiticas de calidad parecida, fundamentalmente la IP de los visitantes.

Pero como siempre ya me estoy desviando del tema que es la atención de los demás como un activo. Harari por ejemplo hacía notar la diferencia entre la violencia que ejercen los gobiernos y la que ejercen los terroristas. Cuando un gobierno usa la violencia por razones de seguridad de estado o lo que sea, siempre hace lo posible por ocultarlo y negar que lo están haciendo, en ese caso para ellos la atención es perjudicial.

Para los terroristas sin embargo la atención es todo, a ellos rara vez les interesa eliminar a personas específicas. porque lo que buscan es montar un espectáculo y para eso necesitan captar la atención de la gente como sea. ¿Y qué hacen entonces? Una violencia indiscriminada, no selectiva, para crear la sensación que nadie está libre de caer. Que mejor ejemplo que el ataque a las Torres Gemelas donde murieron de forma horrible miles de personas inocentes, o a menor escala los ataques en la Araucanía donde incendian, asaltan y matan principalmente a obreros, profesoras y gente que tine poco o nada que ver con el conflicto.

Como el objetivo de los terroristas es causar miedo, en realidad no necesitan hacer demasiado daño, les basta con quemar iglesias, camiones, cosechas, buses, maquinarias y cosas por el estilo. Eventualmente se entusiasman y matan a alguien que se les cruzó  pero eso no es rentable para ellos, mucho más provechoso es el espectáculo y captar la atención. 

Los periodistas están felices con eso, porque su negocio es conseguir la atención de la gente y no existe manera más rápida y eficaz que mostrar hechos de violencia, así es como se convierten, a veces intencionalmente y otras pocas veces no, en cómplices y amplificadores del terrorismo.

Obviamente que los estados o simples civiles también pueden usar el mismo método contra los terroristas, atacándolos de manera indiscriinada y brutal. Así operan los "escuadrones de la muerte" por ejemplo, de civiles o agentes del estado que empiezan a aparecer cuando el terrorismo alcanza cierto punto en que no puede ser reprimido por medios convencionales y provoca una reacción furiosa.

Bueno, esa es más o menos la idea de Habibi, que a mi me hizo pensar en situaciones que ya hemos conocido de cerca. Durante los militares usando esa lógica agentes de la Dicomcar asesinaron a Parada, Natino y Guerrero, creo que ese fue el caso más claro de aplicación de terrorismo de estado, pero en este caso los operadores no buscan aterrorizar a la población general, todo lo contrario, hacen lo que pueden por ocultar los hechos y que los conozcan en lo posible solo los terroristas.  

El terrorismo de estado es muy eficaz porque los terroristas son muy fáciles de desmoralizar, todo su actuar se basa en el supuesto que el estado los debe tratar de acuerdo a todas consideraciones legales, apenas empiezan a ver que esto no ocurre se desbandan. Así fue como se disolvieron poderoas organizaciones terroristas en Chile como el MIR, FPMR, Lautaro y varias más. 

Entonces la situación es esta: los terroristas usan la violencia indiscriminada e irracional para montar espectáculos que aterroricen a la gente y por lo general no necesitan matar o herir a muchos porque lo importante no es a quien se elimina sino los resultados del espectáculo. Ejemplos típicos son las bombas de ruido, incendios y asesinatos al azar para asustar. Las víctimas del terrorismo son al azar y casi siempre gente inocente, normal y no comprometida en el conflicto. 

De preferencia el terrorista ataca al azar. Por eso muy rara vez los movimientos terroristas alcanzan el poder, la gente los aborrece y deben tener una fuerza enorme que pueda anular a las fuerzas regulares de orden y seguridad y además a las Fuerzas Armadas, casi nunca llegan a esa etapa. Incluso grupos con grandes recursos y ventajas como fue Al Qaeda, el IRA, los terroristas vascos, etc. terminan siempre siendo aniquilados o disueltos. Claro que en el proceso muchos políticos tradicionales que los apoyan pueden conseguir importantes ventajas.

Las víctimas del terrorismo de estado son siempre terroristas o asociados combatientes en luchas callejeras. No se cuentan en este caso los violentistas heridos o muertos en luchas callejeras porque esos responden más bien a la lógica de combate tradicional, ente grupos que se enfrentan abiertamente, por supuesto ue los políticos que los apoyan hacen todo lo posible por asimilarlo con "terrorismo de estado" o "brutalidad policial", esa es una de sus herramientas estándar.

El terrorismo de estado es como la Ley de Pareto, ocurre siempre que se dan ciertas condiciones sin importar la época, el lugar y ni siquiera el color político del gobierno de turno. Pero tabién en estas ocasiones aparecen civiles que se organizan para aterrorizar a los terroristas, así es como aparecieron los "contras" en Centroamérica, los "paras" en Colombia o los "escuadrones de la muerte" en Brasil, basta con que se den ciertas condiciones para que el terrorismo de estado y los  civiles contraterroristas empiecen a hacer de as suyas, es un ciclo -en mi opinión- inevitable.

En fin, además de memorión soy demasiado disperso, empiezo con una cosa y termino con otra, por esa falta de foco nunca he sido muy brillante en asuntos intelectuales, pero tiene su diversión pensar disperso, no se puede negar que es divertido.