El liderazgo de Putin

Un pedazo de regalo
Mi buen amigo Marcelo Valenzuela Dieguez, de NIC Chile, me mandó el libro Comunicaciones con fibra óptica, guía de estudios técnicos, un libro completísimo de Rodolfo Veloz, con todo lo que un comunicante o un computin debe saber respecto de este avance fundamental de la ingeniería que nos permite disfrutar de una Internet más rápida, robusta y barata.

Recuerdo que a fines de los años ochenta, cuando todo esto era ciencia ficción, mi amigo Tito Torres me comentó algo así como "vas a ver cuando se conecten las redes con fibra óptica, eso si que va a ser una revolución", en esos años Internet prácticamente no existía y casi todos los computadores se comunicaban con Novel Netware. Y claro que fue una revolución gigantesca.

El libro es -como dicen los gringos- comprensivo porque cubre a la fibra óptica desde todos sus ángulos partiendo por lo histórico, científico, técnico, más un detallado manual de normas y procedimientos. Una biblia para los ingenieros de esa área, es producto de siete años de trabajo en el proyecto Yafun.

Marcelo lleva muchos años recorriendo los rincones más remotos de Chile instalando Internet con tecnologías novedosas, como el uso de las bandas libres en el espectro de la TV digital, es un trabajo increíble desarrollado por NIC Research Labs, que ha aportado experiencia en aspectos de resilencia y robustez de la infraestructura de Internet en Chile. En fin, chas gracias Marcelo por el libro y el calendario.

El liderazgo de Putin
En la entrada de ayer me quedaron pendientes varios detalles sobre la invasión de Rusia en Ucrania, que en parte aparecieron en los comentarios. Creo que hay un asunto que -al menos a mi- me parece muy interesante y es la figura de Vladimir Vladimirovich Putin como líder.

Porque Putin es un líder apoyado por una cantidad no despreciable de rusos. Yo he visto cientos de entrevistas callejeras por Youtube y aunque no todos hablan maravillas de él, muchos todavía lo apoyan, pese a que se dan cuenta de los tremendos errores que ha cometido.

Lo que pasa es que Putin no salió de la nada, tal como muchos otros que han surgido en períodos difíciles, es producto de un proceso social, histórico y económico que siguió al derrumbe de la Unión Soviética. 

Resulta que pocos recuerdan hoy al gobierno de Boris Yeltsin, que intentó aplicar las políticas liberales "a la manera rusa" -un poco como la revolución con empanadas de Allende- y que fue un fracaso espantoso hundiendo a Rusia y a buena parte de sus ciudadanos en la miseria. La corrupción y cleptocracia que vemos hoy en Rusia tiene su origen en 1991 con Yeltsin.

Si la democracia liberal es tan poco apreciada hoy por muchos rusos, es por el desprestigio que tuvo durante los años de Yeltsin. Y no olvidemos que Rusia -mal que mal- tuvo un largo período de orden y prosperidad durante los primeros diez años de Putin. 

Esto no es algo nuevo, Hitler surgió en Alemania por el desprestigio de la República de Weimar y voy a decir algo que va a escandalizar a mis amigos de derecha pero es totalmente cierto: el general Pinochet hasta el día de hoy es popular y recordado como un gran líder por un sector muy importante de los chilenos por el desprestigio de la democracia chilena, que llegó al tope durante el gobierno de Allende.

Obviamente que Putin, Stalin o Hitler no son comparables ni de cerca con lo que fue el general Pinochet y el Gobierno Militar chileno, que se sometió a un plebiscito y respetó los resultados, pero si son totalmente análogos en que, cuando la democracia deriva en demagogia, crea castas políticas y trae miseria a un país se desprestigia como sistema de gobierno, entonces es cuando surgen los liderazgos autoritarios o derechamente autócratas o tiranos.

Si no entendemos las razones del liderazgo de Putin, y creemos ingenuamente que todos los rusos lo odian y sueñan con tener una democracia liberal en su país cometeremos un error de apreciación tan gigantesco como el que cometió Putin al creer que toda Ucrania recibiría como liberadores a los invasores rusos. Es fundamental entender la causa profunda de los problemas y no quedarnos en lo superficial y el cliché.

En Rusia y China está apareciendo de nuevo el fascismo, que se creía -de manera bien ingenua- erradicado para siempre. En muchos otros países la gente está empezando a apoyar una vuelta a los gobiernos autoritarios, lo que decía Wilson como una tendencia a volver a los gobiernos fascistas. En verdad no es lo mismo, pero si son reacciones contra el fracaso de muchas democracias liberales que han creado aristocracias políticas llenas de ladrones e hipócritas. Allí está -creo yo- la causa profunda de lo que está pasando.

Afortunadamente Rusia ya perdió la guerra, pase lo que pase y conquiste lo que sea, el oso ya se quedó sin dientes ni garras por mucho tiempo, y yo espero que el próximo en la lista sea China. Las guerras son siempre muy duras y dolorosas, pero también traen sus beneficios. Tanto que se rieron de Francis Fukuyama y su fin de la historia, parece que ahora lo están desempolvando. El que rie último, rie mejor.