Atención con este video

En este video conversan el abogado Juan Pablo Hermosilla con  Cesar Barros. Me parece importante ya que por primera vez escucho gente que se atreve a hablar claramente sobre los vicios que ha crado la Reforma Procesal Penal y las verdaderas causas detrás de la crisis del imperio de la ley en que nos encontramos. 

Ni Kast, ni ninguno de los Kaiser, ni siquiera los más acérrimos pinochetistas se han atrevido a decir abiertamente que el Ministerio Público ha estado cometiendo delitos de manera sostenida e impune. 

Ni que los jueces y las autoridades políticas rompen el estado de derecho a cada rato por motivos personales y mezquinos, con igual impunidad.

Muchos dirán que no tiene ninguna gracia, porque el abogado Juan Pablo Hermosilla trata de salvar el pellejo de su hermano. Pero eso no impide que se está yendo a la causa: algo mucho más importante que el escándalo farandulero de la grabación y los chats del teléfono.

Se ha creado un escándalo mediático lleno de hipocresía, destinado a influenciar en la masa de los tontos y los ignorantes, con eso hacen gárgaras los Mosciatti y demás payasos mediáticos. Pero esto abre también la posibilidad de discutir los problemas más graves que tiene nuetro sistema de justicia que son:

1. Que la fiscalía viene cometiendo delitos graves de violación de secreto que han sido sistemáticamente ignorados, usando su medio favorito -Ciperchile- como brazo armado al servicio de sus intereses.

Porque ellos están en la envidiable posición de decidir si investigan o no delitos, según les de la real gana, sin que nadie les pueda pedir cuentas. 

La violación de secreto es uno, pero también hay otros delitos que han sido tapados lo que muestra una conducta institucional, más allá de delitos personales. El Ministerio Público se ha convertido en una asociación ilícita para delinquir.

2. Que muchos jueces han estado actuando de manera abusiva aplicando torcidamente la ley, es decir prevaricando, con el pretexto que que a través de su "activismo judicial" ellos aplican nuevas tendencias jurídicas, a las que la ley no les da derecho. Es decir, también están actuando como delincuentes comunes.

3. Que todo esto lo vienen haciendo de manera tan impune, debido a que todo el sistema judicial desde 1990 a la fecha de hoy ha sido controlado por los políticos como nunca antes se vió en el país. Durante Allende habían jueces opositores como Urrutia Manzano, durante Pinochet los ministros Canovas y Retamal -entre otros- lo desafiaron en repetidas oportunidades.

Nada de eso se ha visto desde la llegada de la democracia. El poder Judicial fue brutalmente expurgado y nunca, desde entonces, hemos visto a ni un solo juez que desafíe al gobierno en causas importantes. Si el Poder Judicial hubiese mantenido independencia del gobierno en los años noventa, Ricardo Lagos estaría preso por corrupción. Y no sería el único.

No es que la Reforma no haya traído nada bueno. La multiplicación de los tribunales, la oralidad de los juicios, el apoyo tecnológico masivo respecto del sistema antiguo, que ha permitido un extraordinario sistema de información de causas, esas han sido todas cosas buenas.

Pero todas esas ventajas son marginales comparadas con los daños terribles que ha causado la Reforma. Fue diseñada por aficionados y mediocres profesores, que nunca pisaron un tribunal, cuando un cambio así de importante necesitaba a los mejores.  Eso fue lo que no tuvimos.

Hoy en Chile no tenemos ni certeza jurídica ni estado de derecho. Así ha sido como los políticos se han atornillado a sus cargos desde 1990 hasta el día de hoy. No tenemos nada, estamos en cueros frente a la camarilla política que nos exprime. Esto explica muchas cosas, como por ejemplo:

1. Que después de haber sido el país que recibía mayor inversión extranjera de América Latina, hoy no recibimos ni un cinco en proyectos nuevos ¿quién va a arriesgar su plata en un país donde no se sabe de qué manera se harán cumplir las leyes? A partir del infame "Royalty Minero" nos cocinamos y nadie más quiso arriesgar un peso en Chile.

2. Que tenemos la mayor crisis de crímenes y delitos de toda nuestra historia. Los idiotas le echan la culpa a la inmigración, a las desigualdades sociales o cien otras causas aparentes, pero la verdadera causa es que en Chile el Sistema de Justicia no funciona y cometer crímenes acá es una de las actividades más baratas y rentables que existen.

3. Tenemos un sistema con una Fiscalía Corrupta, con jueces con agenda propia que no les interesa lo que diga la ley sino lo que les conviene para sus carreras. El resultado es la impunidad de los culpables y el peligro para los inocentes, ser investigado por la Fiscalía hoy es una actividad dde altísimo riesgo, especialmente para los que no han hecho nada ilícito.

Las consecuencias de que no exista el estado de derecho en Chile y que los políticos hayan capturado completamente el Poder Judicial son enormes, y espero que este juicio de Hermosilla sirva para poner sobre la mesa la ilegalidad de los que tienen que aplicar las leyes.

El populacho seguirá entretenido con lo anecdótico: el tráfico de influencias, los poderosos y tonteras por el estilo que no tienen ninguna relevancia frente a los problemas importantísimos, de los que recién ahora se está empezando a hablar.