27 enero 2025

Chile y Perú, la diplomacia de los inmigrantes

Recuerdo que hasta principios de los años ochenta en Chile choleabamos mucho a los peruanos, Obviamente en Perú nos rotaban a nosotros y existía una fuerte aversión entre los dos países, al menos respecto de los gobiernos.

Algo muy parecido es la situación actual entre Chile y Bolivia, donde todavía quedan resentimientos de la Guerra del Pacífico, cosa difícil de explicarse porque perdieron la guerra con muy pocos daños, gracias a la cobardía del corrupto Hilarión Daza, que todavía tiene políticos que lo defienden. 

Curiosamente hemos tenido muy poca inmigración desde o hacia Bolivia, aunque algunos chilenos -al menos de acá de Arica- se han mudado a Santa Cruz de la Sierra, pero no han sido muchos.

En comparación, debería haber mucho más resentimiento antichileno desde el Perú. En realidad lo hubo en el pasado, hasta un punto que estuvimos cerca de ir a una guerra, durante el gobierno de Velasco Alvarado. Pero eso ha cambiado mucho con los años.

¡Como ha cambiado! Yo lo veo acá en Arica, donde los mecánicos, albañiles, soldadores y para que decir los cocineros se promueven con eso de "maestro peruano", que hoy en Chile ya es casi una denominación de origen.

Eso también se da en algunas profesiones, en especial relacionadas con el área de la salud. Antes los ariqueños íbamos a un médico o dentista en Tacna por la diferencia de precios, pero pasado el tiempo los precios se han ido equilibrando, sin embargo las clínicas y consultas peruanas siguen con alta demanda de chilenos.

Yo creo que es un cambio que ocurrió como efecto de la inmigración masiva de peruanos hacia Chile en los años ochenta. especialmente gente de la sierra que venía escapando del terrorismo de Sendero Luminoso y los Tupac Amaru.

El cambio no fue para nada fácil. Las primeras olas de inmigrantes peruanos fueron vistas como una peste de cucarachas que infestaba a barrios enteros, como Recoleta en Santiago y otros donde se agrupaban,

Eran detestados como grupo principalmente por sus costimbres de hacer fiestas ruidosas, cocinar en la calle y no pocos que eran delincuentes violentos, que se tomaron algunos barrios.

Pero con el paso del tiempo se fueron integrando y de insoportables pasaron a ser tolerados y después muy valorados. Estos inmigrantes -nayormente serranos- hicieron un trabajo que ninguna política diplomática hubiese podido lograr.

Las primeras de estas embajadoras informales fueron las empleadas domésticas. A diferencia del Perú, en Chile históricamente las empleadas entran a ser parte de la familia y desde hace años la gente dejó de llamarlas empleadas domésticas y se cambió a "nana", "tía" o eufemismos por el estilo.

El asunto es que la mayoría de las empleadas se fueron haciendo indispensables y muy queridas en las casas, muchas por buen carácter, trabajadoras y habilidad para las cosas de la casa, para qué decir de la cocina. Creo que ea fue la primera denominación de origen que tuvimos "nana peruana".

Como buenas aimaras, ahorrativas y buenas para el billete, muchas juntaron plata y partieron con su propio negocito, especialmente en las ferias, que era un ambiente que más se parecía a los lugares de donde venían.

Al poco tiempo ya tenían tomado el sector gastronomía, hoy no existe comida más demandada ni mejor negocio que los restaurantes peruanos.

Pero esto tiene su fondo que no es tan evidente. Resulta que el Perú es un país extremadamente racista, un cholo difícilmente será socio del Club de Arequipa o del Club Regatas en Perú, pero en Chile, somos clasistas y el billete es lo que manda, así no tuvieron ningún problema para ser socialmente aceptados.

Por eso. mientras en Lima los restaurantes de lujo están en manos de pitucos descendientes de inmigrantes, acá en Chile están casi todos en manos de cholos, que son los que tienen sazón y la habilidad empresarial. 

Y no encuentran problemas para codearse con los ricachones, porque acá el color de la piel importa mucho menos que el grosor de la billetera.

Primero las empleadas domésticas, después las cocineras y cocineros que acá se transformaron en chef, cuando en Perú nunca habrían pasado de tener una chichería. Ellos fueron la punta de lanza de esta ofebsiva diplomática espontánea de los peruanos en Chile.

Otra cosa notable ha sido el proceso de adaptación, característico de los aimaras. En pocos años se acostumbraron a no meter bulla, a respetar los pasos de cebra, a no tomar licor en la calle,. Hoy los peruanos que viven en Chile son prácticamente indistinguibles de los locales.

Les contagiamos con esa sobriedad gris característica del chileno apocadito. Recuerdo que el año nuevo de 2008 invité a mi casa a pasar el año nuevo a unos compañeros de trabajo de la Municipalidad de Tacna,

Lo pasamos muy bien, pero al otro día salimos a la playa para pasar la resaca y la ciudad estaba silenciosa y vacía "¡pero que pasa carajo! decía mi amigo Edgar, "en Tacna celebramos la semana completa", estaban desesperados por el silencio y la tranquilidad.

Me imagino que si un peruano, después de vivir en Chile varios años, vuelve a su tierra, debe ser mirado raro porque habla despacio, se rie menos y reclama cuando un conductor no respeta un paso de cebra en la esquina.

Otra cosa interesante es como ha evolucionado la comida peruana. Yo recuerdo en los años 70 y 80 la cocina en Perú era muy mala, freían todo con un aceite de olor espantoso, comidas grasosa y pesadas. 

En los años que siguieron se han ido perfeccionando hasta llegar a los platos exquisitos que tienen hoy, la popularidad de los restaurantes peruanos debe haber influido en esta evolución que vemos incluso en la comida diaria de las casas.

Después apareció otra oleada de los maestros en distintos oficios, de lo que tienen una larga tradición: albañiles, carpinteros, mecánicos, también han mejorado al llegar acá, donde las exigencias son más altas y las herramientas muchas veces mejores, son más responsables y todo eso.

Hay una especie de paralelo entre la evolución de las empleadas domésticas, de la cocina y de estos maestros, que llegaron de un lugar donde todo se hacía más o menos al ojo y con mucha informalidad a otro donde los empleadores y clientes son más cuadrados y formales.

Creo que esta inmigración es un proceso que ha enriquecido a ambos países y hoy nos tiene más lejos que nunca de una guerra o cosas por el estilo.

Especialmente porque está llegando una nueva ola de inmigración, esta vez de profesionales y empresarios. Los mejores alumnos que tuve normalmente eran del Perú, ambiciosos y aplicados, muy diferente a tantos vagos hijitos de su papá como eran varios de mis alumnos chilenos.

Ya desembarcó en Chile el Grupo Gloria, un gigante empresarial, creo que el grupo Yura también, no se si searán los mismos. Pero también han llegado indeseables como Graña y Montero, que están establecidos acá después de una larga historia de coimas y escándalos en su país de origen. 

A propósito de delincuentes, con todo lo mal que estamos como país a las bandas de crímen organizado que han llegado acá no les ha ido nada bien, 

Ellos están acostumbrados a moverse en entornos mucho más corruptos, donde la gente incluso les tiene simpatía y los apoya. Acá la cosa se les pone difícil. 

Los temibles del Tren de Aragua, los Gallegos, otras bandas de colombianos, venezolanos, mexicanos, los Pulpos del Perú, etc. a todos los que llegan a Chile los están agarrando y metiendo a la jaula.

Acá no les resultan -o les resulta mucho menos- los métodos de corromper a la policía, amedrentar a jueces y fiscales, hacerse videos por TicToc disparando y amenazando para aterrar a la gente, en fin, todas las cosas que los han llevado a adquirir poder en sus países.

En Chile somos toros mansos, podemos ser cobardes y temerosos, pero pasado cierto punto, sin hacer grandes alardes ni andar amenazando, cualquier persona común y corriente puede convertirse en peligroso y sanguinario. Además la corrupción puede haber avanzado bastante acá, pero no lo suficiente.

Esto me hace pensar que los criminales que tanto nos preocupan hoy, con el tiempo se darán cuenta que es mejor y más seguro -para ellos- devolverse a sus países. Acá en Chile no es tan fácil la cosa.

¿Parará lo mismo que pasó con los peruanos con los inmigrantes colombianos, venezolanos y otros? Me gustaría pensar que si, que la presión social acá los terminará adaptando a nuestra forma de ser y que los malandras se convencerán que Chile no es una buena plaza para operar.

Si con los merluzos en el gobierno los criminales la están teniendo difícil, imagínense como irá a ser cuando tengamos un gobierno o un parlamento de verdadera derecha, creo que en ese caso no tendrán más alternativa que largarse del país,

14 comentarios:

  1. Un desacato mental...No se si reir..o. ir a buscar el boca negra..SAludos y gracias por su tiempo

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  2. Un optimismo a todo trapo el post de hoy, eso no es malo....tampoco es bueno :-)
    ALgunos detalles: la integracion de peruanos, 250.000, es muy consistente con lo que se ve no solo en Stgo. e imagino en el norte; me recuerda los primeros venezolanos, muchos con profesiones y otros con oficios que llegaron antes de la oleada. Otro detalle, ya en 2023 eran casi dos millones de migrantes, hoy esa seria mas o menos la cifra si descontamos a los peruanos. Parte de la oleada Piñera-Merluzo son patos malos venecos y colombos...y estan orgullosos de serlo, son activistas de su forma cultural, que incluye delitos, y han logrado imponerse en los barrios donde se concentran...lo que esta desatando la vieja xenofobia, aun mal vista en los circulos educados, pero es el huevo de la serpiente madurando. Un gobierno de derecha... sera probablemente de la entreguista, y temerosa, sin plata ni posibilidad de conseguirla prestada o solo con intereses leoninos, con creciente informalidad, con virtual permiso para delinquir en las calles y con el PC y FA ansiosos de probar los limites de la represion, como hicieron con Piñera desde el 2018, con alumnos carne de cañon listo a lucirse pues se saben impunes...Mmmmm no parece un escenario muy optimista.
    Si es seguro que seran "tiempos interesantes"

    ¿EL boca negra de anonimo, se refiere a los fierros?

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    1. Yo creo que se puede repetir lo de los peruanos con los inmigrantes de Colombia y Venezuela.

      Al principio de la inmigración peruana llegaron muchos delincuentes, con el tiempo se la mayoría devolvieron solos, lo mismo pasa con muchos colombianos y venezolans, pero los indocumentados que quieren irse no pueden o tienen muchos problemas porque no los admite ningún país intermedio.

      Si sale Maduro del Gobierno esto va a generar una vuelta masiva, especialmente de indocumentados porque acá no les va nada bien.

      Los malandras están siendo reprimidos incluso en este gobierno merluzo, con el tiempo las leyes se van a endurecer más y más, hay una fuerte presión política para eso.

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  3. Ese fenómeno lo viví muy de cerca, cuando entré a trabajar al antro de rutina. de hecho tuve dos compañeros de carrera que eran pe y eran super capos y más humildes que una sopa de pan, con el tiempo fueron adaptandose y ahora donde trabajo está plagado de restaurantes y polladas peruanas (los más antiguos del barrio dicen que también hay money del narco metido en ello, eso explica el por qué crecieron tan rápido en el sector al igual que las barberías).

    De que a los venecos y cocalombianos les pase lo mismo que a los peruanos, lo veo medio dificil, no se van a adaptar y querrán imponerse echando bravuconadas, pero no ven venir el golpe de vuelta. los anticuerpos que generaron son más fuertes que con los peruanos.

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    1. Los problemas de seguridad que tenemos son producto de la Reforma Procesal Penal y de la descomposición de los altos mandos de las policías, los tendríamos igual con o sin inmigrantes, de no haber delincuentes colombianos y venezolanos, etc. serían chilenos.

      A la insolencia, típica en mucho lumpen de Colombia y Venezuela, le va mal acá en Chile. En los "arrestos ciudadanos" o incluso en situaciones cotidianas donde se comportan de manera insolente les va muy mal.

      Yo tuve unos trabajadores venezolanos acá en la casa que eran así, los boté cagando, en cambio he conocido otros que son buenísimos.

      Afortunadamente no veo los matinales ni las noticias de la tele, eso me permite hacerme opiniones más razonadas sobre el asunto.

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    2. Los peruanos debemos ser las personas que más pollo consumen en el mundo, al menos per cápita. Tenemos pollerías en cada barrio, las hay de todo tipo, desde las más caras hasta las más baratas. No dudo que en Chile algunas hayan crecido por el lavado de dinero, pero también es cierto que teniendo una alta cantidad de peruanos, las pollerías hayan crecido un montón.
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    3. Las recetas para sazonar el pollo asado fueron una de las primeras cosas que se impusieron acá, y todavía los locales peruanos la llevan en eso. El lavado de dinero a mi me parece perfectamente legítimo y bueno, Arica y Tacna le deben la vida económicamente hablando y Suiza es un ejemplo histórico de sus virtudes.

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  4. Interesante saber la percepción actual de mis compatriotas en el suroeste de nuestra placa tectónica. Creo que una de las razones por las que se ganaron cierta fama de trabajadores fue por el momento que llegaron a Chile. En los 80s y 90s las reformas económicas y políticas de Pinochet estaban prácticamente intactas. Llegaron a un país donde no habían "justicieros sociales" que pretendieran "nivelar la cancha". En esas circunstancias, una persona pobre tiene dos opciones, o hacer algo o morir. Venían de un país que pasaba probablemente la peor etapa de su historia. Muchos de esos migrantes eran gente muy humilde que escapaba de la insania terrorista. Lima colapsó y no tuvieron de otra que ir a un país que parecía tener bastantes oportunidades laborales. Al principio no fue fácil, pero creo que en general han sabido adaptarse al ambiente chileno. Por otro lado, al este de la Cordillera, muchos peruanos también migraron por la misma época, pero con resultados algo diferentes. Argentina es un país que hasta antes de Milei se caracterizaba por tener un alto grado de asistencialismo. Era la Meca de los estatistas. Si bien muchos peruanos eran trabajadores, hubo una parte que se hizo dependiente del estado. ¿Qué necesidad había de trabajar? Si el estado argentino daba "oportunidades para todos". Muchos formaban villas, recibían dinero por tener hijos, educación, incluso la superior gratuita, etc. Por algo muchos se ganaron mala fama entre los argentinos. Es que el asistencialismo relaja las ganas hasta al más trabajador. Incluso en las marchas contra Milei más recientes habían chilenos protestando para mantener la "educación gratuita" para extranjeros.
    Sobre el racismo, creo que se exagera bastante en el país. Hemos tenido a indígenas en el Congreso desde su formación. También tuvimos familias muy influyentes como los Choquehuanca en Puno o los Huamán de las Heras de Ayacucho, todo a inicios del siglo XX. Mas allá de unos cuantos, creo que al cholo de a pie no le molesta emparejarse con personas de todo tipo de raza.
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    1. Es cierto que acá los peruanos no esperan nada del estado, en Argentina las distintas formas de peronismo seguramente los echaron a perder jaja. Es un buen punto de comparación, las políticas de bienestar tienen buena parte de la culpa de los problemas con los inmigrantes.

      Mi impresión es que hay una discriminación social de los criollos, descendientes de inmigrantes italianos y otros, hacia los aimaras.

      No es un racismo brutal como el de Estados Unidos u otros países del norte de Europa, sino un poco más camuflado, en las celebraciones es común eso de "todos somos cholos" pero el apellido y color de piel cierra muchas puertas allá, especialmente en cuanto a prestigio social, es complicado, creo que los descendientes de inmigrantes allá son más levantados de raja, orgullosos de sus apellidos y de su color, por más que lo escondan.

      En Chile también pasa algo parecido pero con los $$$, acá somos clasistas y los pobres son muchas veces basureados por los que tienen más plata

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  5. Sobre la inseguridad, en todos lados hay lacras sociales. Creo que la Reforma Procesal Penal ha jodido la justicia en todos los países donde se ha aplicado. La policía puede capturar a los miserables esos cuantas veces pueda, pero de nada sirve si al final los jueces los sueltan. Espero que tanto en Perú como en Chile y en toda Hispanoamérica se revierta esa situación.
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    1. Si, la Reforma Penal es la causa directa de la inseguridad. En Chile, Perú y otros países, la Reforma y otras leyes afines han bajado el costo del delito, esa es la verdadera causa por la que aparecen nuevos delincuentes, simplemente es lo más rentable

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  6. El consumo de pollo es alto en Perú, de los más altos de la región.
    En Argentina en cambio lo alto es el consumo de huevo, de pollo no tanto - Aunque este año el consumo de pollo superó al de carne vacuna, se derrumba un mito nacional.
    Consumir mucho huevo lleva a un subproducto, la gallina vieja, que en general se consume hervida, en mayonesas, etc...
    tenemos por ejemplo el Festival de la Gallina Hervida en Luyaba, Córdoba, algún tango célebre como "Pucherito de Gallina"
    https://www.youtube.com/watch?v=JwUfxvYxwXg
    Tenemos por ejemplo

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    1. No conocía eso de la gallina hervida, tal vez acá lo tengamos con otro nombre, cazuela de gallina podría ser. ¡Comiendo más pollo que carne en Argentina! Eso si que es pecado, el asado y el choripan no se transan carajo!

      Buenazo el tango, tampoco lo conocía :D

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    2. Así es, recuerdo de cuando simulaba trabajar en la Municipalidad Provincial de Tacna, que cuando se producía un problema más o menos grave con conatos de pelea o conflictos, se solucionaba con una "pollada", ahi todos terminábamos borrachos y bien comidos, como buenos compañeros

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