02 julio 2006

Lo que nos queda


Jorge García López es como el papá de mis amigos, con su talento y habilidades fuera de lo común ha llegado a ser ejecutivo de primera línea en grandes empresas de Chile y Perú. Siempre ha llevado a su equipo detrás y tiene entre nosotros una reputación del porte de un edificio. La cosa es que Jorge se apareció por Arica después de mucho tiempo lo que fué una ocasión perfecta para juntarnos a comer y tomar como cosacos, celebrando la llegada del amigo.

Se trata de una persona llena de anécdotas como esa que habla de su bola de cristal, tiene una capacidad de predecir que se la envidiaría Yolanda Sultana. Años atrás, estando con Daniel y Nelson en Lima se juntaron a tomar un trago con un desconocido profesor de economía al que Jorge le dijo directamente "acuérdate, tu vas a ser Presidente del Perú" y claro, era el mismísimo profesor Toledo que en esos años ni pensaba en politica. Cuando Alan García salió arrancando para el exilio Jorge dijo "no se engañen, va a volver como presidente": dicho y hecho. En fin, esta tarde yo mismo fuí testigo de sus dotes de claravidente cuando le hicieron una espinuda pregunta sobre quien creía que había quedado de dueño en cierta empresa, Jorge lo pensó un minuto y dijo el nombre: seco. Ya me quisiera tener un 10% de su claridad en esas cosas.

Durante muchos años yo lo conocía a un nivel más o menos mitológico, todos llegaban hablando de él hasta que unos años atrás coincidimos, estuvimos conversando y me dí cuenta de porqué a algunas personas les va tan bien en lo que hacen. Jorge es el prototipo de la persona de éxito, que hace que pasen cosas y que la gente lo siga. Si tuviera que escoger alguna de sus gracias yo diría que la principal es la capacidad para sentir entusiasmo y traspasarlo a otros, al conversar un rato con él quedas como cargado de energía y creo que esa debe haber sido una de las cosas que le han valorado muchas personas que han confiado en él.

En fin, como siempre un alegrón juntarse con amigos especialmente del calibre de Jorge. Dentro de las muchas cosas conversadas salió el tema de la muerte y la cuenta regresiva que nos va pillando a cada uno de nosotros, inevitablemente, ¿cuanto tiempo nos queda? ¿llegaremos a los 70, 80, 100 años?, quien lo sabe, pero si hay algo claro es que en el momento de hacer un balance antes de estirar la pata, o si es cierto eso de que uno ve toda su vida como una película, las mejores escenas serán las que uno pasó con sus amigos. Toda la vida nos pasamos en medio de cosas maravillosas sin darnos cuenta, de las mejores cosas uno se da cuenta mucho después que ya pasaron pero lo que es claro es que los amigos son lo que nos queda, los amigos son lo mejor que nos queda.

5 comentarios:

  1. Fui a ver las fotos...y opino que con ese nivel de consumo de asados es natural que terminen hablando de la muerte...
    pd: habló la envidia...

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  2. "Si de algo he de morir, que no sea de sed ni de hambre"...
    jajaja

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  3. jajaja no pues!
    te confundieron con el cheché, cabezón
    jajaja

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"Send me a postcard, drop me a line
Stating point of view
Indicate precisely what you mean to say
Yours sincerely, wasting away
Give me your answer, fill in a form
Mine for evermore
Will you still need me, will you still feed me
When I'm sixty-four"