01 noviembre 2008

Hablando de sexo

Estaba recién leyendo El Sexo y Yo de Isabel Allende, donde vuelve a su estilo de Los Impertinentes y cuenta la historia de su educación sexual. Un buen texto, nunca debió haber dejado la crónica que era su fuerte. Pero con los millones que gana escribiendo best sellers, bueno, nada que decir.

Yo creo que es más o menos la historia de la mayoría de los que andamos por los cincuenta: nacimos en una época en que nadie hablaba de sexo, vivimos la revolución de los setentas y ahora de vuelta. Todo el concepto de la educación sexual me parece medio ridículo, inventado por un extraño consorcio de los curas, psicólogos e izquierdistas de salón que consideran que educando a los niños se evitarán todos los males. Que estupidez más grande.

Nada mejor que el sexo para darse cuenta de la tremenda brecha entre generaciones y como los viejos de alma no entienden absolutamente nada  de como funciona el mundo. Nadie se contagia de HIV ni se queda embarazada por ignorancia, eso es una idea muy tonta. Son cosas que pasan simplemente por irresponsabilidad, gente que conoce perfectamente para que sirven los condones y como usarlos, pero les da lo mismo las consecuencias de lo que hacen. Pueden tratar de adoctrinarlos durante años pero llegado el momento actuarán irresponsablemente, no es falta de información sino falta de cerebro, por incapacidad de darse cuenta de que lo que hacemos tiene consecuencias.

Todo esto parte con los padres que se aterrorizan por la manera en que sus hijos usan Internet, y luego salen a cazar brujas contra los pedófilos, esa es la actitud más idiota que puede existir porque a todos nos atrae lo prohibido. Yo no se si como me educaron valdrá para todos, pero si estoy muy contento por la forma en que lo hicieron y creo que es lo mejor para cualquiera. Según recuerdo en la base de mi educación siempre hubo una confianza ciega -de parte de mi mamá- en que yo siempre sabría escoger lo que más me conviene. 

Cuando chico iba a jugar flipper a los juegos Diana, que quedaban en Alameda y eran el centro de los pedófilos, rateros y traficantes de Santiago, mi mamá no se preocupaba en absoluto porque sabía que yo tenía cabeza como para elegir con quienes me juntaba, más de una vez he contado que cuando chico, en la población Santiago tuve muchos amigos delincuentes, mi mamá solo se reía y me decía mira que no se te peguen las malas costumbres, jamás se me pegaron y gracias a esas amistades tuve mucha experiencia valiosa para los años que vinieron.

Jamás recuerdo haber tocado el tema del sexo con mi mamá, menos con mi padre con quien nos juntamos cuando ya era adolescente y no nos teníamos la menor confianza: para eso estaban los amigos y las revistas semi pornográficas de esos años. Sin embargo nunca tuve frustraciones ni problemas en relación con las mujeres, al contrario, creo que tengo mucha más facilidad para relacionarme que la mayoría de mis amigos, aunque rara vez lo he usado para llevarme a una a la cama. Lo que pasa, creo yo, es que entramos a una nueva era de puritanismo, alimentada desde extremos opuestos: los curas por un lado y la nueva izquierda por otro pero con idéntico propósito: manipular y controlar la vida de las personas.

La moral siempre ha sido una herramienta potente para controlar a las personas, por eso las religiones, como notó Nietsche hace años pasaron a convertirse en referentes morales que premian y castigan los comportamientos que les convienen. Pero en los últimos años vemos que es también la política que, con sentido opuesto pero con los mismos propósitos manipulativos, trata de imponer sus propias reglas morales. Toda la guerra mediatica en torno a la educación sexual y al combate a la pedofilia son manifestaciones hipócritas de ideologías, que tratan de manipular a la gente según su conveniencia. No existe idea más aberrante y fascista que la del derecho natural, una idea compartida por curas, masones, políticos y todos los que planean manipular a la gente en provecho propio.

La moral debe ser el castillo personal de cada uno, donde nadie tiene el derecho a meterse. Y todos debemos estar dispuestos a enfrentar las consecuencias de nuestras equivocaciones: no es culpa de los padres, mucho menos del estado ni de la iglesia, las equivocaciones son culpa de cada uno y cuando empecemos a entender y aplicar esto tan obvio se van a terminar muchos de los problemas sociales y pasarán a ser problemas de cada uno, como debe ser. Por mientras, vayanse al diablo malditos curas, políticos, masones y mamones de toda clase. Y mejor lo dejo hasta aquí antes de que me enoje de verdad. Hasta mañana.

9 comentarios:

  1. La buena educacion sexual se nota en cosas como dar las gracias...despues de....

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  2. jajaja estaba tratando de acordarme si alguna vez me dieron las gracias. Hasta donde recuerdo yo nunca las he dado, o sea tuve muy mala educación sexual :D

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  3. te recomiendo:"Les Luthiers - Educación Sexual Moderna"

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  4. Has estado escribiendo tan buenos posts Tomas y yo sin conexion al internet en mi laptop (o casi... bueno, es una larga historia). He disfrutado leyendote y sobre todo el enlace que colocaste para Isabel Allende. Ella me encanta cuando escribe de esa forma!! Me hace reir tanto, ademas que entiendo perfectamente su "proceso mental" en experiencias y como arriba a sus conclusiones. Un ejemplo:
    A los siete años me prepararon para la Primera Comunión. Antes de
    recibir la hostia había que confesarse. Me llevaron a la iglesia, me arrodillé detrás de una cortina de felpa negra y traté de recordar mi lista de pecados, pero se me olvidaron todos. En medio de la oscuridad y el olor a incienso escuché una voz con acento de Galicia.
    -¿Te has tocado el cuerpo con las manos?
    -Sí, padre.
    ¿A menudo, hija?
    -Todos los días...
    -¡Todos los días!
    -¡Esa es una ofensa gravísima a los ojos de Dios, la pureza es la mayor virtud de una niña, debes prometer que no lo harás más!
    Prometí, claro, aunque no imaginaba cómo podría lavarme la cara o cepillarme los dientes sin tocarme el cuerpo con las manos..."

    LOL!!!!
    Un abrazo

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  5. Esa es Isabel Allende en lo que mejor hace, en la crónica humorística es insuperable jaja!

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  6. hay que usar confor despues de y guardarlo bajo la almohada para la buena suerte
    dicen que es mejor hacerlo sin bañarse, asi se conoce mejor a la persona de turno, si es fetida de nacimiento se sabra de inmediato
    por ultimo, siempre hay que llevar money, pa dejarle propina a la chiquilla que les atiende, por ultimo paguenlen en taxi, como a la karla lazo, finita ella

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  7. karla lazo idola,¿ cuando me acompañas al arrechon ? te le llevo una wena conversacion

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"Send me a postcard, drop me a line
Stating point of view
Indicate precisely what you mean to say
Yours sincerely, wasting away
Give me your answer, fill in a form
Mine for evermore
Will you still need me, will you still feed me
When I'm sixty-four"