Tuvimos durante muchos años una fe inmensa en las bondades de la planificación económica. Probablemente esta idea cuajó con Karl Marx, hijo del enciclopedismo y el Siglo de Las Luces, cuando se llegó a pensar que el universo era una maquinaria cuidadósamente engranada de causas y efectos, donde la ciencia se aproximaba cada vez más a explicar toda la máquina.
Eran los años de gloria de la palabra "ciencia", científico equivalía entonces -en la imaginación popular- a verdadero, se hablaba de verdades científicas como el último e irrebatible argumento. En verdad la ciencia nunca pretendió establecer verdades, pero en esos años delumbrantes se confundieron las cosas y Marx pretendió haber establecido una interpretación de la historia y una propuesta social científica, es decir definitiva.
Eso nos trajo unos ochenta años de experimentos planificadores en la Unión Sovietica, Europa Oriental, China y muchos otros lugares donde el socialismo real fue puesto en práctica. Aunque todavía quedan versiones más o menos amortiguadas de esta fe en la planificación ya casi nadie tiene la confianza de esos años. La ciencia volvió a tomar el papel mucho más modesto de hacer predicciones útiles usando verdades provisionales y sobre todo se volvió a reconocer el valor del azar y las enormes limitaciones de muchas explicaciones mecanicistas.
Todo cambió volvimos a aceptar el caos, lo impredecible como uno de los mecnismos más fundamentales de como funcionan las cosas. Antes se pensaba en el mundo como un complicado mecanismo, pero mecanismo al fin, que si se estudiaba minuciosamente se podría ir desentrañando hasta llegar al conocimiento y la predictibilidad total. Ahora se piensa que hasta las cosas más seguras y las verdades más aceptadas podrían fallar, se evita hablar de verdades científicas, cambiando por predicciones más o menos exitosas. Creo que es un punto de vista mucho más realista y humilde.
Aceptar el caos es difícil y contraintuitivo, nuestra experiencia nos dice que muchas cosas son seguras y predecibles: el sol sale por el este y se pone por el oeste, cuando soltamos un objeto se cae en lugar de quedar flotando y así, nos hemos ido creando todo un conjunto de certezas que probablemente se deban a la indelicadeza de nuestros sentidos mucho más que alguna elaborada organización mecanicista. El reloj perfecto y complicado que nos parece la naturaleza puede que sea una pura ilusión.
Esas certezas se dan en muchos otras cosas, por ejemplo esas personas que dicen que la suerte no existe y que cada uno se hace su propia suerte, o los que creen que hay decisiones inteligentes y otras tontas a priori, que el que hace todo bien las cosas le saldrán bien y el que se equivoca o toma malas decisiones las cosas le saldran mal. Ese es un buen ejemplo de la ilusión mecanicista porque ninguna decisión es buena o mala a priori si aceptamos la imprevisibilidad fundamental de las cosas que pasan.
Si todo es estadístico solo tenemos decisiones más o menos probables. Durante un tiempo me dediqué a hacer unos seminarios para enseñar a los pequeños empresarios a llevar mejor sus negocios, de lo que salió el Manual del Pequeño Empresario que escribimos con Daniel Viera. En el capítulo sobre la toma de decisiones me dí cuenta de algo que sabe todo el que alguna vez ha tenido un negocio y entiende como funciona: que no existe ninguna receta para tomar decisiones exitosas porque las decisiones que dan mejores resultados son también las más improbables, igual que en la ruleta, mientras más difícil de predecir mayor es la ganancia y no hay demasiada diferencia entre un jugador de ruleta exitoso y un empresario exitoso, porque no existen las decisiones correctas a priori.
Eso explica que los mejores empresarios no son los más inteligentes, ni mucho menos los profesores de negocios, los mejores empresarios son los arriesgados con suerte y por eso hay muchos menos ricos que pobres en el mundo, la prosperidad está ligada siempre a decisiones improbables que resultan, igual que en la ruleta. Alguien que tome decisiones inteligentes durante toda su vida en el mejor de los casos será un mediocre, porque las decisiones inteligentes son las más probables y -por lo mismo- las que solo pueden aspirar a pagra de la media para abajo. En el mundo además, como buen casino, a la larga siempre gana la banca así es que el sueño que algún día desaparezca la pobreza es una ilusión bastante tonta. Mejor nos acostumbramos a ser pobres nomás.
A propósito de tu columna hoy en La Estrella, discrepo. El verano pasado viaje a Brasil y toda la información necesaria la obtuve desde internet, sobre todo de distintos blogs, y blogs especializados, como blog de viajes (www.blog.deviajeabrasil.com/)
ResponderBorrarAsí que sin conocer nada allá, pude moverme tranquilo, porque sabía donde alojar (en lugares económicos, obvio), por donde moverme, donde comer, que comer, que buses tomar dentro de brasil, etc etc ¡lo sabía todo! y la información es totalmente actualizada.
Resumiendo, creo que la información está en internet, solo hay que hacerle las preguntas correctas a San google.
Eso.
Saludos
Pd: con lo de los notebook entregado a los colegios, y la no entrega de contenido a esos niños, concuerdo pletamente. (aunque insisto, la información está, solo hay que saber buscar).
La verdad es que las Ciencias Sociales y Ciencias Ecnonómicas tienen de prestado el nombre "Ciencias". Estas disciplinas no abordan modelos matemáticos rigurosos ni hacen uso del método científico, como es el caso de las Ciencias Exactas.
ResponderBorrarLas llamadas "Ciencias" Económicas formulan modelos de tipo empírico que son validados en contextos muy acotados e idealizados. No existen modelos que den cuenta de todas las variables explicativas de un determinado fenómeno.
De este modo, desde los tiempos de Marx se ha pretendido revestir de un carácter científico a disciplinas que claramente no constituyen ciencia y de ahí que se obtengan los resultados históricos que todos conocemos.
"Alguien que tome decisiones inteligentes durante toda su vida en el mejor de los casos será un mediocre, porque las decisiones inteligentes son las más probables y -por lo mismo- las que solo pueden aspirar a pagra de la media para abajo. En el mundo además, como buen casino, a la larga siempre gana la banca así es que el sueño que algún día desaparezca la pobreza es una ilusión bastante tonta"
ResponderBorrarMuy bien dicho y muy bien escrito; breve , conciso, a la vena, sin asco ni remilgos.
Un abrazo.
:-)
Pequeñin, es que me refería a la web como un todo, hay cosas muy características en la web
ResponderBorrar1- Muchísimos sitios-panfleto sin información útil (la gran mayoría)
2- Muy pocos sitios con precios, por lo difícil que resulta mantenerlos actualizados
3- Muy pocos sitios masivos,con toda la información sobre un tema en una sola parte
Para que hablamos de Chile o de Arica que es a lo que quería llegar
Claudio, pero existe también un error de concepto con el asunto de "ciencias exactas", que son parecidas a las ciencias sociales en cuanto al alcance de sus "verdades", no existen las "verdades científicas" ni en las ciencias sociales ni en las exactas, solo que en las ciencias sociales esto se nota más por la mayor complejidad de los fenómenos que estudia.
Sergio, por eso los tontos somos mejores, el que toma puras decisiones perfectamente racionales a lo más que puede aspirar es a la mediocridad ;D
Saluti, saluti amigo.
Interesantísimo! Llevado al extremo, este postulado justifica cosas injustificables, como la aficción al juego en las clases menos pudientes.
ResponderBorrarNo es una decisión inteligente, porque toda la teoría de la probabilidad está en contra.
Pero sacrificar el valor de algún atado de cigarrillos - que no cambiaría nuestra vida - por un boleto de lotería - que podría cambiarla radicalmente! - es, entonces, razonable
Hola Ulschmidt
ResponderBorrarLo que es mejor para un individuo rara vez es lo mejor para una clase completa de individuos, las sociedades están diseñadas para proteger y fomentar a los mediocres (eso es lo que se conoce como el bien común, o sea del grupo con más personas). Esos toman la decisión más racional que es apostar a color o par/impar en pequeñas cantidades.
Dos cosas en desacuerdo, primero la WEB si sirve, en mi viaje a Brasil me ayudó mucho. Segundo creo que hay muchas cosas básicas y predecibles no locuras que hay gente que las hace bien y le vá bien, más que suerte creo que es ponerle empeño y creeerse el cuento . Ahora estoy claro que tanto tú como yo amigo no somos ese tipo de gente. Pero hay un sinfín de ideas solo en estas pequeñas cuidades, para quien le pone y se las juega, aunque copien , pero bien. Dos ejemplos básicos , sin tecnologia ni nada, Un Dinamico en Iquique y un Runas(Tutis puede ser) en Arica por ponerle un nombre, y solo porque me gusta los buenos churrascos y el buen carrete para nosotros de la segundad edad, bien hecho exito seguro
ResponderBorrarUn abrazo
Aunque las llamadas "Ciencias exactas" no pueden ser consideradas verdades absolutas, es innegable su aporte a la sociedad (medicamentos, tecnologías, etc.) que ha significado una gran mejora en la calidad de vida.
ResponderBorrarEn contrapartida, no creo que la civilización le deba mucho a los economistas, abogados, cientistas políticos, etc.
No hay éxito seguro, si alguna cosa he aprendido en mi perra vida es que nadie tiene clavada la rueda de la fortuna. Haces todo bien, te descubren un cáncer y te mueres. Chao, a propósito eso -y sus variantes- pasa a cada rato. Te podría hacer una lista enorme de ejemplos.
ResponderBorrarCopiar una idea exitosa (runas, dinámico) tiene todavía menos posibilidades de éxito, es como poner más comensales a la misma sopa, con la diferencia que el que llega después ya no come tan fácil como el primero.
Si existiera una sola receta que te permita ganar con seguridad aunque sea una cantidad mínima te convertirías en el tipo más millonario del mundo. He conocido a mucha gente con plata y todos la han hecho against the odds.
Todo lo que hablan los gurues de como tener éxito es un cuento chino, similar al tipo que escribión el libro "como ganar 1000 millones de dólares" y que se gana sus lucas convenciendo a los demás que el tiene la receta. No hay receta.
Eso de los dados es muy cierto cada vez q uno hace algo sin determinar ni craneandose mucho obtiene resultados bastante interesantes
ResponderBorrarEstaba revisando el manual que publico en un tag en la entrada y lo encontre interesante , justo que me encuentro con unos trabajos de esa índole en teoria de sistemas eso si agradeceria si pudiese subir las ultimas 2 partes ya q no se encuentran
saludos
En realidad aunque eres perfecto o casi ejem ejem algunas veces [contadas con los dedos de las manos... de muchas personas juntas jajaja] tiendes a sobre-simplificar tus analisis.
ResponderBorrarLa vida no es simple, es relativamente compleja, y en mi experiencia, he visto casos de fortunas -no solo de dinero- llegadas de golpe y en contra de las posibilidades, pero han sido los menos. Lo mas abunda es que la persistencia, el esfuerzo, el seguimiento de las formulas ya probadas y experimentadas por otros, dan los resultados esperados. Ejemplo sencillo: el que ahorra toda su vida, sacrificando pequenhos gustos para poder darse muchos gustos "lujosos" en su vejez. Eso se ve en Arica todo el tiempo con los turistas de los cruceros... La minoria son gente de dinero, la mayoria se han sacrificado toda la vida para viajar por el mundo.
Good Evening Mr. Bradanovic
Claudio, eso si que es cierto porque tratándose de problemas más simples los resultados de esas verdades provisionales son por lo general más útiles. Los modelos matemáticos, base de cualquier ciencia, se hacen menos efectivos a medida que aumenta la complejidad del problema.
ResponderBorrarErnie, hay una frase muy buena de W. Churchill que decía que para las cosas de menor importancia el pesaba los pro, los contra y hacía un balance usando su mejor criterio, para las cosas cruciales en cambio se dejaba llevar por el instinto, he leído varias versiones de lo mismo de distinta gente que si sabía acerca de tomar decisiones, no en salas de clase sino en la vida real.
Lilian, tal vez no me expliqué bien y no me entendiste, a lo que me refería es a la toma de decisiones en situaciones inciertas que es -dicho sea de paso- la manera en que se hacen todas las fortunas. No existe ninguna receta para eso y las que mencionaba pequeñin (poner otro Dinámico o copiar cualquiera que le haya ido bien, no funcionan por razones obvias. Eso es lo que enseñan los gurues pero es un engaño.
También es un engaño creer que alguien va a hacer un patrimonio importante ahorrando, como el cuento de Fra-Fra y sus pollitos, porque es lo mismo que cuando pagas la cuota mínima de tu tarjeta de crédito, a medida que pasa el tiempo si solo ahorras la plata se te desvaloriza a menos que la apuestes en un negocio incierto ¿no has oido nunca el cuento de esos viejitos que mueren con montones de billetes antiguos sin valor?
Lo que me dices de la perseverancia reafirma lo que yo puse, la perseverancia es muy buena porque simplemente tiras los dados más veces, no es porque sea una virtud en si sino porque si dejas el juego pierdes toda posibilidad de ganar, solo si perseveras mantienes vivas tus posibilidades.
En esos asuntos hay mucho cuento chino moralista (el cuento de la cigarra y la hormiga y todo eso) pero son solo eso: cuentos. Igual que muchas tontas recetas que enseñana tomar "buenas" decisiones. No existe tal cosa.
Y sobre eso que dices acerca de que la mayoría de los millonarios son por sus decisiones inteligentes y solo una minoría por un golpe de fortuna es reflejo de un hecho muy divertido: cuando alguien llega a millonario lo primero que se convence es que ganó su plata por su excepcional inteligencia, carácter, etc. etc.
ResponderBorrarGalbraith escribió unas líneas muy divertidas acerca de los millonarios que, cuando todos los demás les empiezan adecir que son unos genios terminan creyéndolo. Y del tremendo porrazo que se pegan cuando pierden su plata y se dan cuenta que la supuesta genialidad era un espejismo.