Muletillas

Para los que no lo recuerdan, la jo-jo-jo navidad como la conocemos ahora es un invento de Coca-Cola, como nos ilustra Ulschmidt en su blog "en los inicios del siglo XX la empresa Coca-Cola le encargó al dibujante Handom Sundblom que humanizara y mejorara a Santa y éste fue quien le dió su aspecto actual. Por cierto Santa y Coca-Cola comparten los colores rojo y blanco".

Stephanie Fang dice que nadie hace mejor la navidad que Coca-Cola y nos recuerda las famosas campañas publicitarias de osos polares y pinguinos, de su blog saqué el videoclip de la campaña 2010 que como siempre usa los estereotipos históricos de manera brillante. No voy a moralizar contra el consumismo ni mucho menos, al contrario lo que quería mencionar es como el marketing de Coca-Cola ha venido creando valor de manera consistente a lo largo de más de 100 años. La estética de Norman Rockwell en los años 50, la de Playboy en los 60 y 70 y tantas otras han sido influenciadas por las campañas de esa empresa. Para que hablar de Andy Warholl.

La chispa de la vida, debe haber sido una de las mejores campañas publicitarias de la historia, justo en los setentas cuando los ambientalistas se dieron cuenta que podían extorsionar a las grandes compañías con el miedo a las enfermedades, Coca-Cola sale con su tema "vida", los conceptos de la campaña eran amistad, sencillez, ser auténtico, "disfrutar las cosas buenas de la vida". La compañía ha sido atacada por grupos verdes durante años sin éxito, no han podido botar la marca como lo han hecho con MacDonalds por poner el ejemplo clásico.

Coca Cola también fue adelantada al concepto de responsabilidad social que ahora está de moda, desde los años 20 tienen una estrategia de marketing y una serie de políticas para integrarse a las comunidades donde operan. Aunque yo siempre he pensado que es un concepto bastante estúpido -la única responsabilidad de las empresas es ser rentables y cumplir las leyes- fueron unos adelantados en darse cuenta de la buena prensa que les traerían esas políticas.

Aunque muchas transnacionales se ponen arrogantes y tienden a abusar de su posición dominante a medida que crecen creo que Coca-Cola lo ha hecho bastante bien y eso explica que sea una de las historias de éxito empresarial más largas de la época moderna. No es fácil mantenerse en el número uno durante tantos años. Claro que no soporto su maldito invento del espíritu navideño, pero al fin y al cabo es la estupidez de las personas, la compañía solo le saca provecho.

Leí hace años el libro La guerra de las colas, biografía de Roger Enrico durante sus años a cargo Pepsico en los tiempos de gloria de Pepsi-Cola: el desafío Pepsi, los contratos millonarios a Michael Jackson y otras celebridades, etc. Enrico decía que el negocio de las bebidas de soda es en realidad un negocio de marketing, no existe nada con menos valor intrínseco y con más valor agregado por el marketing que las bebidas de fantasía. A pesar que durante unos pocos años Pepsi pareció amenazar a Coca-Cola esta compañía se mantuvo firme y sigue siendo líder hasta el día de hoy.

A propósito de marketing vi con agradable sorpresa que la reputación de este Templo del Ocio según el pagerank de google subió a 4, lo que me coloca dentro del 5% más alto en Internet. Creo que siendo un sitio personal en español este es el techo que puedo alcanzar y me deja muy satisfecho, gracias a todos los que me han linkeado. Las visitas han bajado bastante pero eso no me preocupa en nada, con unos 200 regulares que realmente se tomen la molestia de leer diariamente y -algunos- comentar este corpus del ocio estoy más que satisfecho, las visitas intrascendentes ni me interesan.

Estoy comiendo un pan de pascua delicioso que me acaba de regalar mi amiga Mila Bulic, me cuenta que usó mitad de mantequilla y la otra mitad la reemplazó por puré de mango, es un pan realmente premium jugoso y repleto de frutas, que delicia. Con razón a Mila le va tan bien con sus tortas y pasteles, es inflexible con la calidad y no hace compromisos. Recuerdo que cuando empezó a hacerlos yo le discutía que en Arica nadie le iba a pagar por la calidad, afortunadamente me equivoqué. A veces me pregunto si no podría hacer algo parecido con mi trabajo, pero a mi no me resulta, no me gusta cobrar.

No se si se han fijado pero hay ciertas muletillas que siempre uso de manera casi inconsciente, por ejemplo ultimamemte he repetido mucho la palabra estúpido con sus sinónimos o variantes. Cuando releo lo que escribo me doy cuenta y me hago el firme propósito de no volver a usarla, pero que puedo hacer, si para donde miro veo estupideces. Hasta mañana.