11 diciembre 2020

Refrito del sábado: violencia y política


(Publicado originalmente el 18 de diciembre de 2006)

La violencia es la partera de la historia, no me acordaba bien del contexto de la frase, así es que googleando llegué al manifiesto comunista. Yo que rara vez olvido donde leí algo, esta vez me falló la memoria, que macana...

No es novedad que anadie le gusta la violencia, especialmente la que otros ejercen sobre uno, porque con la otra las personas suelen ser bien indulgentes y compensivas. Pero partamos definiendo la cosa.

No es tan difícil, podríamos decir que es toda acción que nos obligue a hacer algo contra nuestra voluntad, por el uso o amenaza de la fuerza. Las leyes que no nos gustan son un ejemplo de acciones violentas.

Claro que hay grados asociados a nuestra capacidad de aceptar, que van desde una ley que consideramos injusta, un abuso de poder, acciones políticas de hecho (protestas violentas por ejemplo), asaltos, atentados terroristas, represión política por agentes del estado, etc. En general podríamos decir que es una ley que estamos menos dispuestos a aceptar la violencia que nos amenaza directamente y más dispuestos a aceptar la que no nos amenaza..

La política no es solo el arte de los acuerdos sino también -y sobre todo- el juego del poder. Es interesante ver la televisión boliviana en estos días, un país en plena disputa del poder entre revolucionarios que pretenden cambiar profundamente el sistema y conservadores dispuestos a conservarlo. Bolivia todavía no llega a la escalada, la violencia es aún retórica y ninguno de los bandos ha pasado al uso masivo de la fuerza, seguramente porque ambos están inseguros sobre a quien apoyarán los que tienen los medios necesarios para imponerse.

Distinta es la situación en Israel, Irak o Líbano, donde la violencia ya está en una espiral muy difícil de controlar. La escalada, cuando se pasa de las palabras a los puños, luego a bombas y balazos es caracteristica cuando las fuerzas en conflicto están más o menos equilibradas en los medios. Esta es la situación a la que nadie quiere llegar porque es difícil de detener y muere mucha gente que no tiene nada que ver con las partes en conflicto.

Bueno, todo esto es de Perogrullo, no he puesto nada novedoso o interesante, pero tenía que definir algunas cosas antes de arrojar mi barsa-opinión, que aquí va:

Creo que la violencia y el uso de la fuerza es algo que está en todos nosotros, lo mismo que el deseo de imponer nuestra voluntad sobre los demás, es natural y si no lo hacemos siempre es porque estimamos que no nos conviene en un momento dado.

Siempre hay situaciones en que recurriremos a la violencia si tenemos los medios, especialmente cuando nos sentimos amenazados. La defensa propia es uno de nuestros instintos más básicos.

Los que posan de santurrones y dicen hipócritamente que hay que respetar a los demás a toda costa, cambian de opinión rápidamente cuando se sienten lo suficientemente amenazados, el pacifismo a todo evento es demagogia: para aparecer como "mejores" que los demás. Un mecanismo psicológico básico consiste en usar la moral, etiquetando a su propio bando como bueno y al contrario como los malos, la distinción moral es la forma estandar de distraer la atención sobre el verdadero problema.

Lo ideal es vivir en paz y resolver todo por medio de acuerdos, pero esto solo es posible las pocas veces en que no hay grandes intereses en conflicto, a medida que los intereses crecen los acuerdos se van haciendo imposibles, porque a una de las partes ya no le interesa negociar y la otra debe evitar que la avasallen, esa es la raíz de la violencia y no tiene nada que ver con buenas o malas personas, es el patrón lógico de comportamiento de cualquier ser humano dadas las circunstancias adecuadas.

Los curas, que en otras cosas me caen muy bien, han sido funestos por la hipocresía con que tratan estos asuntos, dando argumentos para quedar bien con todos, el uso de la violencia no es un asunto moral sino que de conveniencia o inconveniencia práctica, todas las aproximaciones morales son hipócritas y causan mucho mas daño pues posibilitan que la violencia escale.

Tenemos entonces dos formas de aproximarnos a la violencia: la de los que esconden sus intenciones con pretextos morales y la aproximación racional, que reconoce el derecho a usar la violencia como política o respuesta, usando la defensa propia con toda la fuerza que tenga disponible.

La desventaja de la aproximación moral es que eterniza y escala las situciones de violencia, mientras que la aproximación racional -al reconocer que una parte debe dominar lo antes posible- ayuda a acortar estas situaciones. Un ejemplo de maniqueismo son los organismos internacionales como la ONU, OEA, etc. cuyas resoluciones y exhortaciones morales sirven de combustible a los conflictos en lugar de acortarlos.

De no existir esta "institucionalidad" internacional los conflictos serían más cortos y terminarían con menos sufrimiento para las personas inocentes, donde sea que meten las narices los conflictos escalan y se eternizan,por una razón sencila: como deben ser "ecuanimes" terminan ayudando a fortificar la parte más débil y debilitar al fuerte, de ese modo se producen los empates eternos como los que desangran hoy al Medio Oriente.

Siempre habrán revolucionarios dispuestos a imponer su voluntad por la fuerza y está bien que así sea. Si alguien siente que está siendo pisotado y está dispuesto a correr los riesgos de sus acciones es completamente lógico que se levante a botar la mesa. Lo estúpido es que por una ideología moral de derehos humanos a todo evento se restrinja la defensa de la contraparte, esa hipocresía es la que lleva a situaciones de violencia eterna porque al bajar los riesgos de hacer revolución fomenta su uso.

Nada debe ser a todo evento, ni los derechos humanos ni ningún otro derecho o consideración moral, todo tiene sus límites y su circunstancia. Si alguien quiere imponer su voluntad con bombas y violencia está en su derecho, pero no debe andar gritando como gallina y exigiendo sus derechos humanos cuando lo agarran. Tiene que pagar el precio de su decisión.

La afirmación "Terrorism is historically normal mode of war. Israel must respect terrorists as efficient warriors and kill them, no matter the collateral damage. Wars are not humane" muestra la aproximación racional al uso de la violencia y es perfectamente válida, tanto para los israelíes como para los terroristas, no es una declaración de principios sino algo que muestra una realidad (el terrorismo) y una manera lógica de enfrentarla provocando el menos sufrimiento (contraatacar con todos los medios disponibles).

Mientras el asunto sea conducido por moralistas la espiral de violencia no se va a terminar nunca, porque son los propios "corazones de abuelita" quienes le echan combustible a los conflictos tratando de evitarlos y de equilibrar las fuerzas.

6 comentarios:

  1. La violencia es siempre necesaria, es la forma en que se resuelven los conflictos cuando no hay consenso, decir que la violencia es "mala" es desconocer completamente la historia y la naturaleza de los seres humanos. El problema es que cuando hay dos bandos con fuerzas más o menos equilibradas, la violencia tiende a escalar y eternizarse. Lo ideal es que un bando se imponga y derrote completamente al otro, solo eso trae paz y tranquilidad porque así la violencia física es reemplazada por la disuación y el miedo.

    Chile está entre los países más pacíficos del mundo, no tenemos una guerra externa desde 1879 y muy pocos países pueden ostentar un período de paz tan largo, tal vez Suiza. Y el secreto de esa larga paz es que desde esos años nos hemos mantenido armados hasta los dientes, igual que Suiza por lo demás.

    La gente tonta y superficial critica el gasto militar sin darse cuenta que gracias a eso ningún otro país se ha tentado en atacarnos durante todos estos años, la disuación es la base de la paz.

    En cuanto a la violencia interna ocurre exactamente lo mismo, cada vez que se debilita la disuasión policial y penal se produce un vacío de poder, florece el crimen, los robos y los motines, eso lo hemos visto una y otra vez en la historia sin embargo la mayoría de la gente sigue incapaz de comprenderlo. No hay forma de tener paz si cometer delitos sale gratis, ese es el estúpido error que heredamos de la cultura francesa, cuya historia ha sido cruzada por la violencia e inseguridad interna.

    Diego Portales tuvo muy clara la necesidad de un estado represor, Manuel Montt y el Gobierno Militar también lo tuvieron claro y esos fueron períodos de mayor prosperidad y enriquecimiento que ha tenido Chile, claro que Montt enfrentó dos guerras civiles, ganando ambas.

    Solo un estado decididamente represor puede garantizar la paz, si el estado no reprime los delitos colapsa, si es débil para reprimirlos como ocurre hoy en Chile, es un estado débil y nadie vive seguro.

    Hay que entender que los delincuentes y terroristas actúan solo porque el que está a cargo del gobierno se los permite, esta permisividad lleva muchos años y es la verdadera causa de la violencia interna.

    Protestar, rechazar, condenar la violencia es un ejercicio de eunucos, lo que corresponde es aplastarla usando todos los medios disponibles y para eso en el mundo real muchas veces hay que saltarse leyes y garantías, así ha sido siempre y así será, por eso lo más importante en un gobierno es que no sea perverso, como el de Venezuela por ejemplo, pero que tampoco sea débil y que esté dispuesto a enfrentar los riesgos y la impopularidad cuando las circunstancias lo justifiquen.

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  2. Muy interesante la precision que hace anonimo: desde el 18.19 se rompe la fantasia de la izquierda renovada, democratica, que "ya aprendio por las malas el 73" y serian gente confiable, un poco lesos respecto del estatismo, pero no fanaticos.
    Error, nunca fueron democratas, solo lo simularon mientras creian que les convenia, se muestran como son desde Bachelet 2.0 y su intento de destruir, via judicial, a la oposicion, soñaron con asaltar el poder; hasta que aparece el fantasma de Ponce Lerou, luego el hijo del año y chao asalto. Pero quedan con la bala pasada, y cuando gana Tatan, lo testean desde fines del 2018 con barricadas diarias y manifestaciones semanales, hasta que se atreven en octubre. Para decirlo en castellano entiguo: son animales y deben ser aplastados como sea.
    Compre Insurreccion de Villegas, ( de pura pica por tener que comprarlo lo escanee), quedo ahi no mas, pero si quieres leerlo te lo maileo. Vale la pena pues anota mucho detalle que uno olvida, otro que vale la pena es Siete Cabezas de Poduje, el agrega su experiencia en las poblas, los territorios narcos y barras bravas, aun espero piratearlo...tiene una entrevistas con Mosciatti y con Warnken. Hay un periodista Pablo Fontirroig que afirma haber investigado parte de la primera linea y su control politico, https://mobile.twitter.com/FontirroigPablo/status/1336788358945787904
    Primeros minutos latosos, pero despues agrega datos segun el comprobados.

    En fin como dices, la clave es Cobarde en La Moneda. Las sociedades siempre tienen su basura, y cuando esta se siente impune actua como lo que es siguiendo sus pulsiones. La diferencia con otras ocaciones, es que aca hay una estructura politica, chilena y extranjera, que aprovecha la ocacion de digitarlos

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  3. En colombia tuvieron un Uribe y un Santos... el primero recibe una guerrilla fuerte y la aplasta derrotandola militarmente, el segundo recibe una guerrilla derrotada, y le da tregua, territorio y escaños en el congreso... Nosotros. que mejor ejemplo.

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  4. Wilson, parrafaseando las palabras del propio Allende A la violencia revolucionaria hay que aplastarla con la violencia reaccionaria eso es lo moral y lo correcto, nada más.

    Unknown, toda la razón, Colombia es la mejor muestra como desde el propio poder político se empodera a los que quieren destruir al estado y al país, eso pasó en Colombia y pasa en Chile cuando cobardes y oportunistas llegan al poder

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  5. Estoy de acuerdo con Wilson que la Concertación fue una farsa.
    Esa es la única manera de aplastar a la basura.

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  6. El tema es que los “realistas” una vez enuncian su oda a la violencia, en forma de reacción, manifiestan serios reparos a ejercer con su mano dicha violencia, y siempre apelan y ruegan estar en el lado institucional de la violencia (el Estado).

    Porque la violencia reaccionaria la tiene que ejercer alguien, ¿no?

    Por mi parte me quedo con mi ingenuo Principio de No Agresión: mientras pueda hacer intercambios que favorezcan a ambas partes (en caso contrario no habría intercambios), yo feliz y en paz. Si me violentan, romperé a puñetazos el rostro del agresor.

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"Send me a postcard, drop me a line
Stating point of view
Indicate precisely what you mean to say
Yours sincerely, wasting away
Give me your answer, fill in a form
Mine for evermore
Will you still need me, will you still feed me
When I'm sixty-four"