10 marzo 2024

Un día de perros

Ayer tuve uno de los peores días de los últimos años con una cadena de eventos de mala suerte, uno tras otro, que me dejaron furioso, todo relacionado con los DOS autos que tenemos en la casa. 

Se que no debería aburrirlos con mis penurias que no importan a nadie, y que ya debería haberla cortado hace rato con mis historias de mecánica. Pero que diablos, tengo que soltar la presión y que mejor que hacerlo en este Templo del Ocio.

Todo empezó anteanoche cuando venía de la casa de un amigo con el que nos juntamos a veces a tomar y hablar cualquier tontera. Era como medianoche, yo estaba muy contento y decidí ir a dar una vuelta a la playa para ver como estaba la cosa. Pero en el camino se me empezó a prender la luz de temperatura de manera intermitente.

Era lo que menos esperana porque pocos días atrás había rellenado con Prestone, así es que me devolvi para la casa con la luz prendida. Al llegar revisé el motor pero el agua no estaba hirviendo ni ningún síntoma de calentón, así es que me fui a acostar tranquilo.

Al otro día pensé en sacarlo a dar una vuelta para ver qué pasaba y nuevamente se prendió la luz de la temperatura, lo llevé a la casa pero esta vez el refrigerante si estaba hirviendo y su nivel estaba casi seco. Así es que salçi en el auto de la Pilar a comprar algún refrigerante barato mientras lo revisaba.

A la salida de mi casa hay una bajada muy inclinada y al llegar abajo y doblar, el neumático frontal derecho del auto de la Pilar se desarmó en pedazos. ¿Qué hacer? Con paciencia y una rueda delantera en el suelo seguí despacito hasta una estación de gasolina que estaba como a dos cuadras. No es primera vez que manejaba con una rueda en el suelo, pero si fue primera vez con la delantera.

Pedí permiso para dejar el auto allí mientras buscaba como cambiarle la rueda, así lo hice y me fui caminando las cinco cuadras hasta mi casa -incluido subir la cuesta- bajo la canícula del son de mediodía, de paso me llevé un bidón de anticongelante relativamente barato.

Lo eché a mi auto y premunido de dos gatas y algunos palos para afurmar me fui a cambiar los neumáticos. Entonces empezó la fiesta. 

Las dos gatas estaban en mal estado -años que no las usaba- y solo levantaban hasta la mitad, así es que pasé largo rato haciendo figuras con cuñas para instalar la rueda de repuesto de mi auto en el auto de la Pilar.

Finalmente la instalé, hice andar el auto y rodó con un sonido horrible, la rueda era de esas chicas que les dió por usar en los noventas y chocaba contra el caliper trabando todo. Antes de romper algo me hice el ánimo y me puse a sacar la rueda que tanto me había costado poner.

¿Qué hacer? No podía estar ocupando el espacio allí para siempre así es que se me ocurrió una solución de emergencia: le sacaría la rueda de atrás a mi auto, se la pondría al de la Pilar y colocaría la rueda de repuesto en mi auto. Se imaginarán lo que fue eso con el calor y las gatas en mal estado.

Finalmente lo hice, mi auto tiene ruedas anchas con aros de aleación que también topaban, pero al menos no se trababan, así es que me llevé despacito el auto donde la Pilar. Bajé de nuevo a pié -el calor no aflojaba- y me llevé mi auto, al fin estaban los dos vehículos en mi casa.

¿Todo solucionado? Claro que no, porque la Pilar tiene que ir al terminal el domingo y a trabajar el lunes y el auto no puede andar con esa rueda rozando. Eran como las seis y media de la tarde así es que bajé en mi auto a buscar alguna vulcanización que montara un neumático que tenía de repuesto. Llegué justo antes de que uno cerrara y -cuatro lucas mediante- ya tenía el neumático montado.

Ahora me tocaba sacar el mio y colocar el recién montado al auto de la Pilar, otro drama con las gatas pero esta vez me demoré menos. Solo me faltaba sacar el repuesto del mío y colocarle el original de nuevo. Sorpresa: no hubo forma de sacarlo, está como pegado porque al parecer es de un tamaño demasiado chico.

Tendré que llevarlo a un taller a que lo saquen a martillazos, bueno también tengo que llevarlo a que vean por donde está perdiendo refrigerante porque yo no pude encontrarlo, ahora el sistema está nuevamente seco. Mis hípótesis son:

1. Pérdida por alguna manguera o una junta del radiador (mi favorita)
2. Bomba de agua atascada (parece que no es eso, en todo caso es barata)
3. Termostato o tapa del radiador (también es mi favorita). O en el peor de los casos...
4. Empaquetadura de culata soplada. Eso es prácticamente imposible, yo conozco bien los síntomas y no tiene ninguno de esos (pérdida de potencia, vapor de agua en chorros por el escape, aceite con agua como café con leche)

Finalmente ¿Por qué se deshizo el neumático de la Pilar? Resulta que lo mandó a pintar y reparar un golpe y los sinverguenzas del taller le cambiaron los neumáticos al auto que estaban perfectos -yo mismo los fui a comprar- por unas basuras que estaban en las últimas. Ni la Pilar ni yo nos dimos cuenta. Obligado a mandar incendiarle el taller.

Después de todo eso estaba furioso, hasta llegué a contestarle de mala manera a la Pilar cuando me dijo no se qué cosa, algo que no hago nunca porque soy extremadamente educado. Normalmente manejo mi ira de formas más eficaces y crueles, pero esta vez la situación me la ganó.

Bueno, bueno, recordé que hace muchos años tenía una amiga. que cuando tenía días malos, llenaba la tina de agua caliente, se llevaba un par de sandwiches y unas cervezas -o algo más fuerte si el día había sido muy malo- que se comía y tomaba mientras chapoteaba en la tina hasta que el agua se enfriaba.

Yo no soy tan cerdo como para comerme unos sandwiches en el agua, pero la situación ameritaba hacer algo parecido, así es que me comí dos sandwich en mi escritorio, llené la tina y me fui a chapotear con una cerveza que casualmente se estaba enfriando el el refrigerador, santo remedio.

Después de casi una hora se me había pasado el enojo y la frustración, ahora estoy fresco como un baby, listo para enfrentar los palos y glechas de la aviesa fortuna.

 Todo tiene remedio menos la muestr, que es el remedio para todo.

3 comentarios:

  1. Así es Don Tomas, hay días así, donde todo se complica.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Dicen que las cosas malas vienen de a tres ¡pero a mi me salieron como siete al hilo!!!

      Borrar
  2. Perdona que te responda a esta hora pero leyendo tu columna solo podría decirte que lo tuyo puede ser lo siguiente:

    - Radiador tapado
    - Sensor de temperatura dañado
    - Termostato trabado en modo cerrado (que es el que causa la mayoría de los calentones
    - sistema de refrigeracion tapado con corrosion (coagulos)

    Recomendación:
    Siempre antes de cambiar el refrigerante, hay que hacerle una limpieza de sistema de enfriamento del motor. hay quimicos que hacen esa pega y una vez terminado eso, purgarlo y después echarle el refrigerante. un Prestone 50/50 es el ideal para estos casos.

    ResponderBorrar

"Send me a postcard, drop me a line
Stating point of view
Indicate precisely what you mean to say
Yours sincerely, wasting away
Give me your answer, fill in a form
Mine for evermore
Will you still need me, will you still feed me
When I'm sixty-four"