01 noviembre 2020

La muerte de James Bond

La foto es de 1965 camino el Festival de Cannes, en el apogeo de su fama. El actor escocés Sean Connery acaba de morir a los 90 años. 

El autor
Las novelas
de James Bond fueron escritas sin grandes pretensiones, en alguna parte leí que Ian Fleming -su autor- las calificaba de escritura chatarra, cuentos para niños grandes que explotaban las fantasías y sentimientos de inferioridad que tienen casi todos los adultos, que sueñan con tener una "licencia para matar".

Y aunque se vendieron todas muy bien desde 1952, cuando apareció la primera novela de la serie, Casino Royale, Fleming empezó a tener problemas personales y a medida que escribía más títulos de la serie empezó a recibir críticas. Paul Johnson fue uno de los más ácidos críticos, acusando a las novelas de estar repletas de "sexo, esnobismo y sadismo", también la acusó de una "total falta de ética" comparándola desfavorablemente con otros escritores mucho más moralistas.

Pero James Bond estaba destinado a la fama, todos los ingredientes se juntaron cuando John Kennedy, en la cumbre de su popularidad dijo que la novela "De rusia con Amor" estaba entre sus diez libros favoritos, lo que catapultó la fama de Ian Fleming y de las novelas de Bond.

Se juntaron muchas cosas para producir el fenómeno social que produjeron estos cuentos de hadas para niños grandes, fue una tormenta perfecta. Ian Fleming había sido oficial de la inteligencia naval inglesa y como la mayoría de la gente que trabaja en esas cosas era un poco infantil, venía de una familia pudiente y cuando Kennedy es electo Fleming fue invitado a una festa en la Casa Blanca. Gracias a esa coincidencia partió todo el fenómeno Bond.

Dicen que en la fiesta conversaron y Fleming le dijo a Kennedy que debía deshacerse de Fidel Castro -cuando todavía no era percibido como un peligro- leo lo siguiente sobre es conversación:

Una sugerencia divertida
Fleming le dijo que la barba de Castro era la clave. Sin la barba, Castro se parecería a cualquier otra persona. Era su marca registrada. Entonces, Fleming dijo que EE. UU. Debería anunciar que descubrieron que las barbas atraen radiactividad. ¡Cualquier persona que lleve barba podría volverse radiactiva y esterilizada!
Castro se afeitaría inmediatamente la barba y pronto caería del poder, cuando la gente lo veía como una persona común.
Kennedy se rió mucho de esta extraña sugerencia.

La cosa es que Fleming le cayo en gracia a Kennedy, ofreció mandarle algunas de sus novelas y el presidente se comprometió a leerlas. Cuando las leyó, Kennedy, que también era bastante niño chico quedó encantado, se convirtió en un fan de 007 y el resto es historia.      

Fleming era fumador y borracho empedernido, con la plata que ganó de sus novelas construyó una gran casa en Bahamas, que llamó Goldeneye y en 1961 vendió los derechos para llevar al cine las novelas de 007. Murió en 1964 a los 56 años, así es que apenas alcanzó a conocer el fenómenos social creado en torno a James Bond, porque Goldfinger se estrenó -según leo- en 1964, el mismo años de su muerte.

El actor
En 1962, después de una extensa búsqueda, los productores contratan a Sean Connery, un escocés desconocido que había dejado la escuela a los 13 años, para trabajar como repartidor de leche, carpintero de ataudes, tramoyista, fisiculturista, modelo publicitario y actor en pequeñas obras de teatro,  para un pack de 5 películas. Era la tuerca precisa que faltaba para armar la máquina.

Bond completó el personaje, que en las novelas era una especie de superhéroe bastante aburrido, agregándole características divetidas, irónicas. 007 pasó de ser un tipo machista, amoral, que jamás pierde, pero Connery lo convirtiño en un personaje humano y atractivo. La calidez de la actuación que Connery imprimía a sus personajes fueron la base del éxito durante toda su carrera.

En una entrevista contaba la siguiente anécdota:
"Cuando tomé un taxi durante un reciente Festival de Cine de Edimburgo, el conductor se sorprendió de que conociera el nombre de cada calle que pasábamos. "¿Cómo lo sabe?" preguntó. "De niño solía repartir leche por aquí", le dije. "¿Entonces que haces ahora?" Eso fue bastante más difícil de responder"

Ese era el estilo de sir Thomas Sean Connery, que aborrecía su primer nombre (Thomas-Tomás) y usaba el segundo (Ian-Juan), tal como yo aborrezco mi primer nombre (Juan) y uso el segundo (Tomás), al menos en una cosa muy remota nos parecemos. cálido, humano y con un ego perfectamente controlado, a diferencia de la mayoría de sus colegas actores.

Connery tenía muy buena apariencia, medía 1.88 y era bocdo petecido por las mujeres, ya de viejo, fue elegido por la encuesta de una revista como "el tipo más sexy del mundo", pero aunque le abrió puertas no se quedó en eso y pudo decir como ese cliché que era más que una cara bonita. Hizo siete películas de Bond, todas éxitos comerciales, entre 1962 y 1971 hizo las primeras seis: Dr. No, De Rusia con amor, Goldfinger, Thunderball, Solo se vive dos veces, lo diamantes son eternos, en 1983 filmó Nunca digas nunca, cuando ya estaba envejeciendo. Después de eso, sabiamente dejó de hacer el personaje.

Muchos actores jamás se pueden deshacer de un personaje que los ha llevado a la fama y lo repiten una y otra vez, a veces con distintos nombres ¿Cuantos tipos rudos hicieron Wayne, Bogart, cuantos gangsters hizo Cagner? Bueno, resulta que Connery supo envejecer y hasta quedarse pelado con gracia, nunca se estiró la cara ni se tiñó el pelo y allí, después de desprenderse de James Bond, empezó su carrera como buen actor. 

El nombre de la rosa,  Indiana Jones, La caza del Octubre Rojo fueron tres de las mejores películas en su etapa de viejo, d una serie de otras buenísimas, la última superproducción en que participó fue La liga de los caballeros extraordinarios, una porquería que al parecer lo motivó a retirarse del cine.

En fin, todo fue un cóctel donde seguramente la casualidad tuvo mucho que ver para lograr una mezcla tan perfecta. Un escritor excéntrico -ex oficial de inteligencia- escribió novelas mediocres, que fueron llevadas al cine y se convirtieron en un fenómeno social. Un tremendo actor que contribuyó tanto o más que el autor en crear todo el fenómeno y que al envejecer fue creciendo más y más en su profesión, hasta que murió ayer colmado de honores y forrado en plata, en su casa de veraneo de Bermudas, tal como Fleming y cualquier caballero briton que se respete. Debe haberse muerto con la ceja levantada, seguro, solo fíjense en las dos fotos.

11 comentarios:

  1. Tipazo este actor. Le conté ayer a mi pareja de su muerte y a pesar de ser ella bastante joven, entró en depresión. Las mujeres se meaban por el.
    Una pena, su muerte, pero 90....
    Quien es el chorito que se escapa?

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  2. Vivió más de lo común y murió forrado en plata y honores ¿qué más podría pedir? También fue suertudo

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  3. Como anécdota adicional, el comic (y sobre todo la película "Kingsman", tiene inspiración con la "educación" que le dieron a Connery para transformar al "chico de barrio" un gentleman.
    Larga vida al Rey...

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  4. Esa no la sabía!
    La verdades que James Bond murió en 1983, cuando se terminaon de filmar todas las novelas de Fleming si no me equivoco. De allí para adelante se transformó en un "franuicia" que compraban los productores para aprovechar la fama de 007, contratando escritores que nada tenían que ver con la idea original, aparte del nombre del personaje. desde entonce la películas de 007 se transformaron en un pastiche ridículo con historias absurdas repletas de efectos especiales, eso lo llamaron después "películas de acción". Muchas otras películas exitosas siguieron ese camino para hacer plata fácil a partir de un éxito comercial vendiendo franquicias, las de Lucas por ejemplo, una porquería

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  5. Ian Fleming tenía una hermano explorador que escribió un libro sobre tartaria. Se llama Peter Fleming fue soldado y explorador.

    Antes de su papel de BOnd habían trabajado en Disney en una película. apea

    Recuerdo de chico que vi una película de Sean Connery en que hacía un detective inglés que les pegaba a los maleantes, mientras los interrogaba. Eso era típico en el mundo policial anglosajón de los setenta. Esa película la hizo para quitarse el personaje de Bond. Otra película clásica es "La Colina", donde unos soldados son obligados a subir un cerro como castigo.

    Y otra película de los setenta que ví cuando llego el cable fue 'Zardos'. Un película de ciencia ficción dispótico, Connery hace de bárbaro, mientras los millonarios del mundo viven en un mundo aislado y son inmortales.

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  6. Vivía en España para pagar menos impuesto y le gustaba pintar.

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  7. Connery fue buen actor desde el principio, transformó a un personaje que pudo haber sido débil y plano en un icono, 007 no tenía mucha materia prima y hubo muchos por el estilo en esos años, pero le sacó un provecho extraordinario haciéndolo simpático y humano pese a todos los clichés de las novelas. Ningún otro actor consiguió eso y todos se montaron más o menos sobre lo que había construido Connery. Después filmó un montón de otra películas, la mayoría buenas, la que mencionas del detective tal vez sea "Los Intocables".

    Fleming era otro personaje, un dilettante de familia muy prominente, no tenía idea de su hermano explorador, claro que no llegó muy lejos como escritor, habiendo salido de Eton tal vez se esperaba mucho más de él que las novelas de 007, pero consiguió fama y buena plata, con un empujoncito de JFK. Todo el fenómeno de 007 fue muy sesentero, típico de esos años

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  8. Otro dato curioso que muestra lo influyente de la franquicia de 007 es que el juego de Golden Eye para Nintendo 64 revolucionó el género de los juegos de disparos en primera persona. Lo que hace ese hecho más excepcional todavía, es que los juegos basados en películas suelen ser malos. Muy pocos no lo son.

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  9. ¡Hasta en los juegos! Un verdadero fenómeno social

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  10. Recién me vengo a enterar que murio Sean Connery...el mejor 007 de todos los tiempos.

    Por cierto, era votante del partido Nacionalista Escoces...

    Marcelo

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  11. Si Marcelo, y cuando estuvo en la Marina se hizo dos tatuajes: uno decía "Mom and Pa" y el otro "Scotland for Ever" o algo por el estilo

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"Send me a postcard, drop me a line
Stating point of view
Indicate precisely what you mean to say
Yours sincerely, wasting away
Give me your answer, fill in a form
Mine for evermore
Will you still need me, will you still feed me
When I'm sixty-four"