Picadillo del Jueves 2 de junio 2022

El presidente ariqueño
Anduvo por nuestro pueblucho don Juan Eduardo Fuentes Belmar, el nuevo presidente de la Corte Suprema, inspeccionando a sus tropas en los tribunales y corte local de apelaciones. Me llamó mucho la atención que cuando el diario publicó la noticia no mencionara que se trata de un juez prácticamente ariqueño, bueno, no exactamente porque llegó a nuestra ciudad desde Valdivia en 1990, nombrado como ministro titular de la Corte de Apelaciones de Arica y ejerció durante diez años en nuestra ciudad. Después de eso, el año 2000 pasó a ministro en las cortes de apelaciones de San Miguel y de Santiago, dos plazas que suelen ser la antesala para la Suprema. Y así fue porque el 2011 llegó a supremo, me parece que este año fue nombrado presidente.

Ser elegido presidente de la Suprema debe ser uno de los procesos más difíciles que existen en Chile. Claro que han existido casos de "vía rápida" para jueces militantes serviles a los intereses de los políticos, los jueces de criterio independiente la tienen doblemente difícil, tal como pasó con el supremo Javier Moya, que también llegó desde Arica y fue sacado de carrera dos o más veces en beneficio de jueces "galletas" militantes. Me parece que en este caso el nombramiento fue acertado, conocí al juez Fuentes mientras fue ministro acá y también conocí al ministro Moya, ambos objetivos, justos y buenas personas.

Me alegro por el nombramiento aunque me extraña que no le hayan dado más difusión a la trayectoria que estos jueces tuvieron en Arica, en fin, dicen que nadie es profeta en su tierra. Acá tuvimos también al fallecido juez don Jorge Quiñones Garat, no me cansaré de poner que es el mejor juez que he conocido, un modelo de integridad y buena persona, en el mejor sentido de la palabra.

La invasión estancada
¿Y como les va a los rusos en su invasión de Ucrania? Pésimo, yo creo que ya fracasaron, en el mismo sentido que Estados Unidos fracasó en Vietnam o la Unión Soviética en Afganistan, al no conseguir ninguno de sus objetivos estratégicos. Pero más que eso, Rusia ha empeorado mucho su situación política y económica respecto a antes de la invasión, para qué hablar del respeto. Estados Unidos después de Vietnam salió con su orgullo muy maltrecho pero no se desprestigió al grado que hoy está Rusia. 

Ese es un problema grave, porque la política exterior de Rusia se ha basado desde siempre en la amenaza y en usar el temor para conseguir sus objetivos. Cuando a un país así dejan de tenerle miedo queda en una posición muy debil. 

Siempre se había considerado a las fuerzas armadas rusas como las segundas más poderosas del mundo en guerra convencional, ahora la Otan se le para enfrente sin miedo. El Gobierno Ruso ha amenazado con "consecuencias inconcebibles, nunca antes vistas", léase respuesta nuclear, frente al envío de armamento moderno a Ucrania. Bueno, las amenazas no han resultado y todavía no han decidido ninguna respuesta nuclear. 

Parece que no tienen maldita gana de usar sus cabezas nucleares ¿por qué no lo hacen? Tal vez les preocupa que pase algo parecido a lo del ataque convencional, y no estén muy seguros que puedan hacer un despliegue eficaz de su arsenal nuclear ¡ese si que sería desastre!. La amenaza nuclear es la única herramienta que les estaría quedando, si la usaran y perdieran el desastre ruso sería total. Es como amenazar con una pistola de aire comprimido y que se den cuenta, algo muy peligroso. Mucho más lógico parece mantenerlas como herramientas disuasivas  Si no pueden meter miedo con esas están completamente fritos.

Es una lástima, yo simpatizaba con los motivos rusos, pero la decisión de invadir resultó desastrosa, debieron haber dado marcha atrás apenas las cosas empezaron a salir mal. Hay que saber cuando soltarle la cola al tigre. Estados Unidos y la OTAN deben estar sobándose las manos de felicidad, han podido golpear durísimo a Rusia sin mandar a combatir un solo batallón, todo el trabajo lo está haciendo Ucrania, ellos son los que ponen la sangre

Vuelve el cuco del covid
Mientras en todo el mundo se han ido desinflando las medidas, absurdas y abusivas, tomadas en nombre de "la salud pública", en Chile seguimos y a la gente le encanta, son muy populares y existe una fuerte presión social contra los que no nos vacunamos ni jamás compramos las historias de terror sobre el peligro de no usar mascarillas y cosas por el estilo. Nada que hacer, como sabemos el chileno es manso. Claro que también es menso, si pudiésemos vender estupidez se terminarían para siempre todos nuestros problemas económicos.

En Cuba, como en muchas partes del mundo, acaban de levantar el uso obligatorio de mascarillas en casi todas partes. En buena parte del mundo se ha terminado la histería de forzar a la gente a vacunarse, en especial a los niños, que resulta de una estupidez inconcebible. 

Ya llegamos adonde han llegado todas las epidemias en la historia: finalmente el virus mutó a una variedad mucho menos peligrosa y mucho más contagiosa, casi todo el mundo ya se ha contagiado, especialmente con Omicron y no hay hospitales colapsados, médicos decidiendo quien vive y quien no ni nada de esos cuentos de horror con que han aterrorizado a los ignorantes.

La piedra fundamental para meter miedo a la gente son los "testeos" para ver quienes están contagiados, y como es lógico hay cada vez más gente contagiada. Eso que debería aliviarnos, porque nos trae inmunidad natural, muchísimo menos riesgosa que las vacunas, y se usa hoy para asustar a la gente. Que diablos, yo apuesto que en no mucho tiempo más empezarán a aparecer estudios serios que muestren la realidad de lo que ha sido el manejo de la epidemia. No se puede tapar con un dedo la fisura en el dique de mentiras que se ha levantado para controlar a las personas.

La perfección existe
Me había propuesto escribir entradas más cortas, pero mi gen charlatanesco me gana. En fin, esto lo haré cortito. Existen pocas cosas perfectas en el mundo material, cada categoría de cosas tiene su ejemplo. A mi que me gustan los fierros tengo mi ejemplo de perfección máxima en el motor de una Citroneta. Lo tiene todo: simplicidad, simetría y optimización, solo miren esta belleza. Me imagino un auto híbrido con un motor de citroneta para cargar las baterías ¿por qué no?