19 febrero 2012

Este presidente, de buen corazón

Mi amigo el arquituerto Marco siempre me manda notas curiosas, como esta sobre el argentino Domingo Faustino Sarmiento, quien vivió largos años de exilio en Chile durante el gobierno de Juan Martinez de Rozas. Debe haber sido muy entretenida la llegada de los exiliados argentinos en esos años, que en muy poco tiempo se apoderaron de los editoriales de los principales diarios produciendo un terremoto en la anémica vida intelectual que debe haber tenido Chile entonces.

Argentina fue siempre el país más europeo de América del Sur, mientras Chile estaba aislado por la tremenda muralla de la Cordillera de los Andes, que solo se podía atravesar en mula con tremendos sacrificios, además del desierto enorme por el norte convertían a nuestro país en una isla, provinciana y petulante. Pero con la llegada de los argentinos se deben haber encontrado con la horma de su zapato.

Vicente Pérez Rosales, el chileno más brillante de esos años les tenía un cordial odio, seguramente le hacían la competencia y le chocaba la extroversión porteña con que deben haber llegado muchos de ellos, así escribe respecto de Sarmiento en sus "Recuerdos del Pasado"

Aplicando ahora el sistema climatérico de consultar los extremos del frío y del calor para deducir de ambos la temperatura media de una región, a la averiguación del término medio de las facultades científicas y literarias que nos importó la inmigración argentina, resaltan, desde luego, ante los ojos del observador, el ingenio y la chispa de Sarmiento y la necia opacidad de Tejedor. Cito a un mismo tiempo estos dos personajes, no porque crea que pueden marchar juntas tan opuestas inteligencias, sino por el desplante y la desfachatada arrogancia que uno y otro tuvieron para dar a la estampa en un español barbarizado cuanto disparate se les venía al pico de la pluma.

Sarmiento, cuando vino por primera vez a Chile, tenía más talento que instrucción, y menos prudencia que talento. Su vivísima imaginación, sus arrebatos, sus inconsecuencias, su espíritu polemista por excelencia, le hicieron olvidar ya la sagaz cortesía que debía a los adelantos intelectuales del país que le asilaba, por diminutos que ellos fuesen, ya los dictados de su propia conciencia, pues al mismo tiempo que elogiaba la pureza del lenguaje , la propiedad de los giros y la perfección artística del canto elogiado, que arrancó a la culta pluma de don Andrés Bello la funesta catástrofe del templo de la Compañía, ocurrida el 13 de mayo de 1841, se le vio salir en las mismas columnas de El Mercurio, que a la sazón redactaba, con el audaz despropósito que era desatino estudiar la lengua castellana, porque el castellano era un idioma muerto para la civilización, y con otras herejías literarias de este jaez, intercaladas con descomedidos insultos a nuestra pobre literatura patria.

Que entretenido es leer a Pérez Rosales, me parece estar viviendo en esos años, con el loco Sarmiento asombrando a nuestra pobretona intelectualidad, mientras Pérez Rosales se muerde la lengua de rabia. El artículo del arquituerto me llevó a releer ese extraordinario libro que es Recuerdos del Pasado. Vicente Pérez Rosales se pasó la vida tratando de ganar plata, de fracaso en fracaso. Hacia el final de su vida encontró la receta: se casó con una viuda multi millonaria, el libro termina con este extraordinario párrafo, parece que lo hubiese escrito para mí:

"¿Qué utilidad práctica para los indiferentes podrá tener esta compilación de vejeces, en la cual la tijera que suprime ha tenido más parte que la pluma que relata, y que sólo publico por complacer a mis amigos? Lo ignoro; a no ser que se tenga por tal la relación de hechos que acrediten la bondad del precepto ¡NO DESMAYES!, porque la mala suerte no es eterna, y porque así como el hombre a impulsos de su adversa estrella puede descender de suma altura hasta la humilde condición de criado, puede, también, con la ayuda de la constancia, de la honradez y del trabajo, elevarse después hasta ocupar en el festín de los reyes un codiciado asiento. " Léalo, se lo recomiendo.

Otro sábado ocioso, releyendo un libro excelente, también hice unas traducciones y corregí dos tesis que estoy guiando: una está excelente, la otra es una verguenza ¿que hacer? Tal vez a mi pesar tendré que aplicar el hacha ensangrentada, pero les voy a dar la última oportunidad. Veremos si la aprovechan o no.

A propósito de cosas curiosas ¿vieron las coplas de Evo Morales en el carnaval? "Este presidente de gran corazón, a todas las ministras les quita el calzón". Creo que se volvió loco, solo miren esto:

10 comentarios:

  1. Sarmiento tuvo una frtuctífera estadia en Chile, ahí escribió su libro mayor, que ahora es considerado la novela argentina mas importante del siglo XIX. Novela, ensayo y varios géneros se cruzan en ella, "Facundo - civilización y barbarie" describe la agitada vida de un caudillo riojano ya fallecido y analiza el drama argentino como una confrontación entre la ruralidad provinciana y bárbara y la elite de las ciudades, ilustrada, europeista, que intenta construir una nación moderna sobre esa materia.
    Lo publicó por entregas en el diario La Republica de Santiago y en muchos pasajes se dirige al lector chileno expresamente, no quedando dudas de en qué tiempo y lugar fue escrito.
    Como uno le tiene resquemor a los clásicos y ni hablar de lo escolar y obligatorio, yo no lo leí hasta hace un par de años. Es muy bueno, de una prosa amena y chispeante - aunque en esos libros que vienen con gran pompa primero hay que evadir los prólogos, prefacios y comentarios previos de antologistas que pretenden pre´-digerirte el contenido y condicionarte la respuesta: oscurecen en vez de aclarar, Sarmiento es mucho más accesible que ellos.
    Lo mismo me ha pasado con Darwin y con Kafka y con tanto autor célebre que viene "explicado" por los estudiosos posteriores, mejor saltárselos y leerlo directo.

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  2. ..ah, y con respecto a la posición de Sarmiento con la Patagonia, era notorio que favorecía el Estrecho para Chile. Otros exilados argentinos promovieron la incorporación de Mendoza a Chile en esos años, intento secesionista reprimido luego a puro degüello. En esos mismos años otros exilados argentinos en Bolivia se acercaron al mariscal Santa Cruz y promovieron la anexión de las provincias nor-argentinas a la novedosa Confederación Peruano-Boliviana.
    El caso es que Diego Portales mandó a paseo a los secesionistas mendocinos y se concentró en la Confederación nortina que consideraba una amenaza para Chile. Luego estalla una guerra, en el "frente argentino" se sufre una invasión boliviana que se rechaza seguida de un contra-ataque argentino que se rechaza y se estanca la guerra pero permanecen los bolivianos con alguna conquista territorial bajo control. Chile gana esa guerra en Yungay, la Confederación se disuelve, los gobernantes bolivianos negocian con los argentinos y devuelven los pueblos ocupados. Empate.
    Diego Portales definió no meterse con la política tras los Andes y definió el Pacífico sur como el área donde Chile debía predominar. No se cuánto ha cambiado desde entonces.
    En cuanto a Sarmiento, como Lenin haría tras la revolución bolchevique, prefería perder tierras desiertas o baldías y lograr un "núcleo" civilizado. "El mal que aqueja a la Argentina es su extensión" llegó a escribir. Prefería dejar algunos bárbaros (indios, gauchos) afuera del proyecto para hacerlo posible.

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  3. Tenía la opcion de leer sobre Sarmiento o irme directo al bonus track sabroso. Jajaja, que personaje Evo Morales. Respecto de tu comentario acerca del alcohol y que deja menos cuadradas y mas creativas a las personas, aqui el resultado da para opinar pero innegablemente divertido.

    IvanR.

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  4. Ulschmidt, que bueno el dato, voy a buscar Facundo a ver que tal. En realidad gracias a los comentadores, explicadores y aplaudidores uno le toma cierta distancia a los clásicos y a veces se los pierde, a mi me pasó lo mismo con Pérez Rosales.

    La política de Portales sigue intacta hasta hoy, Perú siempre va a ser nuestro "enemigo natural" y no lo digo en términos de guerra sino de rivalidad comercial principalmente. Somos países de tamaño parecido y prácticamente con las mismas riquezas mineras (cobre), por nuestra posición geográfica competimos por los mismos mercados, en fin, nos disputamos el mismo hueso.

    Hay muchas cosas en que podemos y debemos cooperar, pero en otras estamos condenados a competir y esta competencia puede ser en buena lid -como la competencia económica que planteó Alan García en su segundo mandato- o pateando la mesa como ha ocurrido en las dos guerras que tuvimos.

    Santa Cruz y Portales lo vieron muy claro y ambos tenían una visión sobre la supremaciá comercial en el Pacífico Sur. Chile jamás va a poder invadir ni ser invadido por Argentina o Bolivia, la geografía lo hace impractiocable, pero con Perú tenemos muy blanda y permeable, que se presta de manera natural para que aparezcan problemas.

    Creo que por eso es muy valiosa la relación especial que se da entre Arica y Tacna, ha sido el amortiguador natural de muchos roces porque son ciudades muy ligadas y dependientes entre si. Si estas ciudades no existieran y estuviesemos separados por una gran tierra de nadie o un desierto, como ocurría antes de la guerra del Pacífico, la situación sería mucho más complicada yo creo.

    Ivan, que tal presidente ¿no? A mi me recordó a Abdala Bucaram de Ecuador. Si uno ve el video sin audio, mi impresión es que lamayoría de la gente está choqueada pero nadie se atreve a decir al rey que está desnudo. Es muy curioso lo que le estápasando a Evo.

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  5. ..con Evo, claro, se dan las contradicciones del sistema, como decía Boogie El Aceitoso. El tipo superador y de izquierdas termina cantando coplas de un machismo rampante y grosero. Y es que en la clientela que pretende representar todos esos prejuicios permanecen así que él debe ejercerlos para ser representativo. Tiene un vicepresidente intelectual, guerrillero y gay - todo muy moderno - pero se jacta de levantarles el calzón a las ministras frente el vulgo. Se trata, claro, de bromas, por todo es muy simbólico.
    Es el mismo tema de Civilización y Barbarie, siempre.

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  6. A mi Evo me recuerda a Toissant Louvertoure, el primer presidente de Haiti, que hizo su propia revolución francesa. Civilización y barbarie, claro, no me imagino algo parecido en un gobierno normal.

    Tal vez haya algún asunto cultural que no conocemos y tal vez en carnavales de Bolivia estas cosas no sean tan raras. Pero me parece, por la cara de los asistentes, que muchos quedaron medio shokeados con el asunto, no creo que sea nomal.

    La osentación de machismo, no se, super raro. Me diola impresión que nadie se atrevió a decirle que estaba cometiendo un error, pero muchos lo pensaron. Con so no hay como tomarlo en serio.

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  7. Un golpe bajo a las mujeres con ovarios hipertrofiados y a los varones con gónadas atrofiadas. Que escándalo para los sectores progresistas que una de las principales figuras de la izquierda latinoamericana salga con este chiste pícaro cargado de machismo; creo que le salió del alma y a lo más merece un "como presidente, debe ser más serio". Que se revuelquen las feministas furiosas y los feministas calzonudos. :D

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  8. A mi me da la impresión que Evo es como un niño que le enseñaron a manejar un camión, es muy simpático pero su ignorancia y falta de criterio pueden ser muy peligrosas, es impredecible.

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  9. Facundo es un interesante libro. Yo aporté en la revisión de varias hojas en el sitio de Project Gutenberg Distributed Proofreaders (se me había olvidado!)

    http://www.gutenberg.org/ebooks/33267

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  10. ¡Bajado! Gracias amigo, chas gracias, lo empezaré a leer al tiro

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"Send me a postcard, drop me a line
Stating point of view
Indicate precisely what you mean to say
Yours sincerely, wasting away
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Mine for evermore
Will you still need me, will you still feed me
When I'm sixty-four"